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Paula Nieto: "El entorno del alumno que sufre acoso debe denunciar para no ser cómplice"

Un grupo de 22 jóvenes avilesinos recibe una distinción de Educación por un plan contra el bullying desarrollado a lo largo de este año

Por la izquierda, Paula Nieto, Adeline Laporte, Pablo López y Malena Gil, ayer, durante una videoconferencia desde el edificio Fuero. R. SOLÍS

Son jóvenes y repudian el acoso escolar. Para analizar esta lacra, un grupo de estudiantes avilesinos ha participado estos meses en un proyecto que ha sido premiado por la Federación de municipios y provincias y el Ministerio de Educación con motivo del Concurso de Buenas prácticas municipales. Utilizaron los métodos de la acción social que son la investigación, la intervención y la participación para dar con las claves para luchar contra el acoso escolar. Realizaron entrevistas y llegaron a una serie de conclusiones que les han servido para ser condecorados. La empatía con la persona que sufre bullying (acoso escolar) y la denuncia de este tipo de situaciones son los pilares. "El entorno de la persona que sufre acoso tiene que ayudar a denunciar y no convertirse en cómplice", resalta la coordinadora del proyecto "Participa, joven, contra el acoso", Paula Nieto.

Este plan desarrollado y apoyado por la concejalía de Juventud contó con la participación de un grupo de veintidós jóvenes entre 16 y 22 años. La primera parte del proyecto consistió en la investigación sobre el acoso y para ello, realizaron una serie de entrevistas con el responsable del plan de salud mental del Principado, José Ramón Hevia, psicólogos, familias, centros educativos, la asociación contra el acoso escolar, técnicos de la Consejería de Educación y la edil del ramo, Nuria Delmiro, entre otros. "La intención era finalizar el proyecto con un teatro-foro como cuando realizamos el proyecto de la depresión entre los jóvenes, pero llegó la cuarentena y no se pudo llevar a cabo", señaló la coordinadora del proyecto. Aún así, el plan avilesino ha sido uno de los seleccionados en esta convocatoria a la que podía concurrir las entidades locales adheridas a la FEMP que desarrollen actuaciones específicas en el ámbito de la prevención e intervención frente al absentismo y el acoso escolar. Otras ciudades premiadas en este apartado han sido Conil de la Frontera (Cádiz), Molina de Segura (Murcia), Rivas-Vaciamadrid (Madrid) o Santander. "Todos estuvieron bien conectados durante la cuarentena", destacó la coordinadora.

Los jóvenes compartieron sus reflexiones sobre el perfil del acosado y del acosador y coincidieron en que los "testigos" son piezas clave a la hora de desenmascarar el bullying. "Los tutores también juegan un papel importante, los profesores han de ser conscientes de que se está produciendo un acoso aunque en clase, sea más sutil y sea más claro en los tiempos libres", apuntó la coordinadora del proyecto, que ayer participó en una videoconferencia en la que se concedió el galardón con algunos de los jóvenes participantes en el estudio contra el acoso escolar desde el edificio Fuero.

Paula Nieto manifestó, además, que los jóvenes descubrieron que existe un plan de acoso escolar y un protocolo de actuación fijado por la consejería de Educación del Principado y también observaron "la mucha burocracia" existente para tratar este tipo de situaciones "aunque depende de cómo se detecte" ese acoso. Entre otras cuestiones, los participantes en el programa premiado analizaron los datos referentes al acoso escolar en Asturias como, por ejemplo, que un dos por ciento de los alumnos asturianos sufre bullying de tipo grave. A esta variable, cabe incorporar los datos relativos al ciberacoso, que crecen con el paso del tiempo.

La coordinadora de "Participa, joven, contra el acoso", Paula Nieto, insistió además en la necesidad de denunciar los abusos priorizando "el apoyo entre iguales" y generar un espacio de convivencia adecuado en el que prime el respeto en las aulas y fuera de ellas.

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