La paralización de la actividad quirúrgica no urgente y la desprogramación de las consultas especializadas debido a la crisis del coronavirus explica que, a día de hoy, casi medio millar de personas estén en el Hospital Universitario San Agustín en lista de espera quirúrgica superior a seis meses, un número que hacía años que no se alcanzaba en Avilés, con una demora para pasar por el quirófano relativamente ágil, y que contrasta con los 13 enfermos que el pasado enero, antes de declararse la pandemia, esperaba más de 180 días para ser intervenidos. El total de personas que están pendientes a día de hoy por una intervención quirúrgica en el San Agustín es de 2.505 y la demora media es de 122,6 días, casi el doble que en enero, cuando la espera media estaba fijada en 64 días, según los datos a los que ha tenido acceso este diario.
Cabe destacar que la mayoría de comunidades autónomas, y Asturias no fue una excepción, paralizaron la actividad no urgente ante la necesidad hacer frente a las personas enfermas por covid-19. En el San Agustín se pasó de una previsión de 6.170 intervenciones quirúrgicas a la realización de 2.760, con una disminución importante en los peores meses de la pandemia: 638 operaciones en enero, 656 en febrero, 462 en marzo, 181 en abril, 300 en mayo y de nuevo 523 en junio. La previsión es que la actividad vuelva a las cifras iniciales si bien durante la temporada estival siempre disminuye considerablemente la actividad quirúrgica.
En consultas externas el parón por el nuevo coronavirus también fue importante. Con más de 17.000 consultas en enero y alguna más en febrero, se bajó a 13.895 en marzo y 6.771 en abril para retomar el pulso en mayo en junio. En total se citaron a 83.508 pacientes. Como curiosidad, en el primer semestre del año únicamente se realizaron 356 consultas especializadas en horario de tarde y en el mes de abril se duplicó el número de pacientes "no presentados"; es decir, que no acudieron el día y la hora a la cita con el médico del Hospital San Agustín supuestamente por temor a un posible contagio por el nuevo coronavirus en el ambiente sanitario. Habitualmente los pacientes que se saltan las consultas suponen el 3% del total.
Estos números alejados de las previsiones para 2020 y que el virus no se ha ido son los que obligan al gerente del área sanitaria avilesina, Ricardo de Dios, a renegar del término "nueva normalidad". Donde sí está al día el área sanitaria avilesina es en la fase de transición hacia esa ansiada normalidad en la que se intercala de forma progresiva la actividad asistencial habitual con la atención a pacientes con coronavirus. Y uno de los primeros objetivos del Servicio de Salud del Principado (Sespa) en este momento es priorizar la atención de los pacientes catalogados como preferentes por sus patologías. También está el interés de rebajar las listas de espera y disminuir los tiempos de ingreso. Actualmente, de las 2.505 personas que están en lista de espera quirúrgica en el Hospital Universitario San Agustín, 489 requieren hospitalización y el tiempo de espera en este caso es de 122 días. Otros 609 están pendientes de una operación en la unidad de corta estancia quirúrgica, donde la lista de espera ha pasado de 72 días en enero a 133 en junio. El resto de enfermos están a la espera de una cirugía local ambulatoria, con 101 días de espera respecto a los 58 que había en enero, siempre según los datos extraídos del cuadro de mandos del Hospital San Agustín.
En el mismo documento destaca también la actividad en el servicio de Urgencias, por ejemplo. Allí atendieron desde enero y hasta junio un total de 28.677 casos, de los cuales solo 7.138 fueron derivados desde los centros de salud del área de Atención Primaria. Como en el resto de servicios, las semanas más complicadas por la pandemia también se notaron en esta unidad que en enero registró 6.888 pacientes y en abril únicamente 3.231, con un promedio diario de 107 enfermos, una de las cifras más bajas registradas en el complejo sanitario avilesino de Camino de Heros donde los profesionales de urgencias atienden, de media, a unos 150 pacientes.
