"Desde la Administración y desde los ayuntamientos, dada la situación de esta última semana y de los riesgos, el mejor servicio que podemos prestar para mantener la salud y la prevención es hacer las menores convocatorias posibles que junten a personas, y eso quiere decir que hay que reducir mucho toda actividad que pueda conllevar un riesgo", señaló ayer la Alcaldesa en el marco de la reunión que mantuvo con el gerente del área sanitaria III, Ricardo de Dios, un encuentro en el que se analizaron los criterios sobre las posibles actividades festivas que estarán marcadas por las medidas sanitarias por el coronavirus. El de ayer fue la primera reunión institucional entre el gerente y la Alcaldesa. Las celebraciones serán las menos en Avilés este verano.

El gerente del área sanitaria destacó la relación de cooperación que ha tenido con los alcaldes de la zona durante el confinamiento para enfrentar la crisis del covid-19. "Ahora tenemos un nuevo reto, hay que llevar mascarilla y estar en grupos reducidos. A colectivos como los de jóvenes, después del largo confinamiento, les está costando, pero hay que cumplir y esperar a la vuelta a la antigua normalidad".

Ricardo de Dios señaló que la situación del San Agustín es de "normalidad", con sólo un ingresado en la UCI por el covid-19. "Es un caso de hace tiempo, no es nuevo. No hay nadie ingresado en planta. En el área sanitaria la mayoría pasó el covid-19 en asistencia domiciliaria", explicó.

El gerente señaló que los sanitarios ya han comenzado a disfrutar las merecidas vacaciones. "No sabemos qué va a pasar en otoño e invierno. Por el covid-19 estamos aprendiendo a vivir con incertidumbre. La plantilla la necesitamos en otoño e invierno", manifestó Ricardo de Dios.