"Aquí seguiré, por el momento no he tenido ninguna respuesta; nada de nada, no tengo atención médica. Estoy algo cansado, pero de momento aguanto en pie", asegura David Peláez, uno de los trabajadores de una subcontrata de Asturiana de Zinc (Azsa) intoxicados por mercurio en 2012 que suma ocho días en huelga de hambre para reclamar, una vez más, atención sanitaria por sus dolencias.

Cambia Avilés (CA) se solidarizó ayer con el trabajador. "Exigimos a Azsa que cumpla el acuerdo firmado y a las instituciones públicas que garanticen las prestaciones derivadas del accidente laboral. David Peláez reclama a Azsa el cumplimiento del acuerdo que firmó con los intoxicados hace ocho años, lo que supondría una solución a su situación económica, social y familiar", apuntaron desde la confluencia a través de un comunicado.