Desde las 18.56 de ayer y hasta las 20.15 horas los trenes de Cercanías de Renfe no pudieron circular en la línea que va de San Juan de Nieva a Oviedo como consecuencia de la caída de un rayo a la altura de Nubledo, en el concejo de Corvera. No hubo incidencias personales, aunque los viajeros sí que tuvieron que bajar del convoy. Y es que el accidente causó que, al menos, veintiún viajeros que procedían de la capital asturiana se quedaran colgados en la capital corverana. "Llevamos aquí cerca de media hora esperando que nos lleven a Villalegre y a Avilés", señaló un afectado del accidente meteorológico. "No viene nadie", admitió el mismo viajero puesto en comunicación con este periódico.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) indicó que la circulación quedó suspendida "por una avería en la subestación de Villalegre". La gravedad del problema se sustentó en que quedaron afectados las señales de tráfico, la comprobación de desvíos y, sobremanera, se produjo una caída de tensión en catenaria.

El ADIF asegura que a las 19.15 horas se recuperó la corriente eléctrica. Sin embargo, el problema persistió en las señales y en la comprobación de desvíos. Los servicios de mantenimiento solventaron la crisis pasadas las ocho y cuarto, que fue cuando se restableció la circulación.

Los viajeros del tren que se quedaron colgados en Nubledo a la espera de un transporte hasta sus estaciones de destinos lamentaron también haberse quedado así bajo la lluvia. Y es que ayer, pese a haber sido una jornada que rondó los 40 grados en las horas centrales del día también sufrió precipitaciones típicas de una tormenta de verano.