Los estibadores del puerto de Avilés inician hoy una huelga indefinida tras romperse ayer las negociaciones entre la parte empresarial y los representantes de los trabajadores. El acto de mediación celebrado ayer en el Servicio asturiano de solución extrajudicial de conflictos (Sasec) se cerró sin acuerdo, pese a que en la jornada previa todo hacía prever que las posturas se habían acercado y volvería la paz portuaria.
Esa tranquilidad laboral comenzó a resquebrajarse hace unos días, cuando el comité de empresa del sector de la estiba registró un preaviso de huelga para manifestar la disconformidad sindical con la escasez de trabajadores fijos en plantilla y por la oposición a la pretendida disolución del centro portuario de empleo (CPE), la sociedad empresarial que actúa como entidad gestora de la estiba en el puerto de Avilés.
La representación empresarial puso ayer sobre la mesa del Sasec la contratación de catorce trabajadores, lo que supone pasar de la plantilla actual de 32 trabajadores a 46. Aportó el nombre y apellidos de esos catorce trabajadores a contratar y se comprometió a mantener el resto del contenido del borrador del acuerdo en el resto de cuestiones que habían sido tratadas con la parte social, así como la tabla salarial que presentó en su momento a los representantes de los trabajadores.
Los sindicalistas rechazaron la oferta y dicen sentirse "engañados" porque su propuesta "ya rebaja en un 30% la factura de la estiba en el puerto de Avilés". Según su versión, estaban dispuestos a aceptar esas contrataciones pese a estar por debajo de sus pretensiones (reclaman una plantilla de 56 estibadores), pero rechazaron la propuesta porque la parte empresarial rechaza cubrir las jubilaciones que se vayan produciendo (este año hay tres y están previstas otras dos en 2021).
El Puerto afronta a partir de hoy una huelga indefinida de la estiba con servicios mínimos. La empresa sostiene que la huelga rotatoria e intermitente que se propone es ilícita.
