Fuentes portuarias y sindicales coinciden en reseñar que el conflicto latente en el sector avilesino de la estiba está más cerca de ser resuelto que de desembocar en la huelga que el comité de empresa de la sociedad gestora de esta actividad prevé activar mañana, viernes, si no se llega a un acuerdo satisfactorio para los intereses de los estibadores. Los flecos pendientes tienen que ver con la firma de las tablas salariales y la concreción de qué estibadores eventuales serían los 14 a contratar para llegar a una plantilla de 46.
El optimismo, con todo, es moderado porque también la semana pasada pareció posible llegar a un punto de entendimiento tras la mediación del Sasec y finalmente todo saltó por los aires, provocando el retorno de las partes a sus postulados iniciales.
Un portavoz del comité de empresa aseguró que las negociaciones con las empresas no han cesado en los últimos días, pues parece común el interés de llegar a un acuerdo consensuado antes que provocar un terremoto en la organización laboral de la estiba portuaria avilesina, que es lo que causaría la huelga anunciada para mañana y días sucesivos si llega a producirse y la respuesta que cabría esperar por parte de las empresas: disolver la sociedad de gestión del sector y que cada empresa asociada absorba a una parte proporcional de los trabajadores.
