Un sevillano con una trayectoria de, al menos, tres lustros en la Fundación Nao Victoria es el capitán que resultó encarcelado el lunes tras dos asaltos sexuales a bordo del galeón "Andalucía", amarrado en el muelle del Niemeyer. Los hechos sucedieron en la travesía entre Santander y Avilés y en las instalaciones portuarias de la ciudad, una vez que se establecieron, por dos semanas, en Asturias. Al hombre se le atribuye un delito de abuso sexual, argumento que llevó a la titular del Juzgado de Instrucción Número 5 de Avilés a dictar una orden de prisión provisional comunicada y sin fianza de acuerdo con el ministerio fiscal.
Los hechos, adelantados por LA NUEVA ESPAÑA, tienen como víctimas a dos chicas que viajaban en el galeón, una de las cuatro réplicas de barcos históricos -junto a la "Nao Victoria", la "Nao Santa María" y la "Nao Victoria 500"- que la Fundación del mismo nombre emplea para promocionar y desarrollar eventos relacionados con el mundo de la navegación.
Una de las denunciantes amaneció con una lesión anal y sospecha de abuso sexual, pues poco recuerda de lo sucedido y mantiene el temor de que pudiera haber sido anulada su voluntad mediante el uso de alguna sustancia química. Sucedió en el viaje a Avilés. Y el capitán repitió un segundo intento, ya amarrados en puerto, pero la otra chica se despertó sobresaltada cuando el hombre trataba de meterse en su cama.
El acusado comenzó a navegar con la Fundación Nao Victoria en torno al año 2005. Largas travesías a bordo de recreaciones históricas de los buques que utilizaron los marinos españoles que viajaron a las Indias fueron su estreno como piloto, primero, y ahora, como capitán. En su última estancia, en Santander, fue donde comenzaron a gestarse los delitos que ahora se atribuyen al capitán. Allí participó junto a otros responsables del galeón en varios actos con las autoridades locales y responsables navales. "Animo a visitar este barco, una réplica de los que utilizaban los antiguos marinos españoles que navegaron por todos los mares e intentar imaginar lo que sucedió en sus cubiertas", dijo el ahora encarcelado en una recepción con la Alcaldesa de Santander.
La Fundación Nao Victoria le apartó una vez que tuvieron conocimiento de los hechos y lo despidió por una falta "muy grave". En su actos públicos, el capitán, de origen sevillano, ensalzaba la oportunidad de las travesías para disfrutar del buque. La próxima será a Ferrol, sin él al timón.
