Europa vuelve a dar motivos de preocupación a los pescadores asturianos, cuyas rentas dependen en buena medida de la pesca de varias especies que podrían verse afectadas por restricciones de cupos de captura si prospera la propuesta de recortes para el año 2021 que ha hecho pública la Comisión Europea (CE). Para el nuevo ejercicio, el planteamiento de la institución comunitaria es fijar 23 pesquerías sujetas a la regla del Total Admisible de Capturas (TAC) y, siguiendo los dictámenes científicos, se recomienda que 13 de esas poblaciones vean reducidas en mayor o menor medida las cuotas de pesca.
“Las consultas para muchas de esas poblaciones pesqueras aún están en curso, al igual que las negociaciones sobre las relaciones pesqueras entre la Unión Europea y Reino Unido, incluida la pesca; por lo tanto, los TAC respectivos de especies en las que tienen interés los británicos se establecen como pro memoria a la espera del resultado de las negociaciones”, explica la CE en un comunicado. El retraso en las negociaciones con Reino Unido sobre el brexit ha impedido incluir en el documento pesquero de la CE stocks tan relevantes para la flota asturiana como la merluza, rape o lenguado del caladero de Gran Sol (donde faenan los palangreros de altura), además de los stocks del mar del Norte, que interesan sobremanera a las flotas holandesa y belga.
Sí se ha hecho público, no obstante, la propuesta para las aguas españolas, que apunta a una nueva serie de recortes, en línea con los de los últimos años. Es el caso de la merluza sur de las aguas comprendidas dentro de la zona VIIIc (mar Cantábrico) se fija el TAC en 7.825 toneladas, un 12,7 por ciento menos respecto a la cuota adoptada en 2020. El rape sur también sufre un recorte del 12,7 por ciento y se fija el tope de captura en 3.672 toneladas. El gallo sur sufre un tijeretazo del 10,8 por ciento, hasta las 2.158 toneladas. La cigala del Cantábrico noroeste mantiene su particular cierre precautorio y se fija el TAC en 2,4 toneladas. Por su parte, para el lenguado del golfo de Vizcaya, Cantábrico noroeste y aguas de Finisterre a Cádiz se propone un recorte del 41,5 por ciento, hasta reducir el cupo a 502 toneladas.
La propuesta se negociará en el Consejo Europeo de Ministros de Pesca a celebrar entre el 15 y 16 de diciembre y los nuevos cupos entrarán en vigor a partir del 1 de enero. El comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevius, ha señalado que “la propuesta del Consejo muestra nuestro compromiso de preservar la biodiversidad en el mar, que es la base para que prosperen nuestras comunidades costeras. Los científicos nos están diciendo que establezcamos límites de captura más bajos para muchas de nuestras poblaciones y seguimos ese consejo. Establecer límites de captura responsables mantendrá nuestros ecosistemas saludables y nuestro sector pesquero rentable, incluso frente a recortes a corto plazo. Este es nuestro principio rector también en las negociaciones con nuestros socios internacionales”.
En 2020, 62 de 78 TAC se establecieron en un nivel que “permite un futuro saludable para la biomasa de las poblaciones de peces, teniendo en cuenta los factores socioeconómicos en comparación con solo 5 de 35 en 2009”, recuerda la Comisión. A pesar de la reducción de la actividad pesquera durante los primeros meses del presente año debido a la pandemia del coronavirus, “los resultados preliminares muestran que el sector sigue siendo rentable, y se espera que los beneficios brutos alcancen los 1.500 millones de euros en 2020”.
La reacción de los armadores al plan de recortes de cupos pesqueros no se ha hecho esperar. El secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, rechazó la propuesta presentada por la Comisión Europea. El responsable de la Cepesca –patronal de armadores– ha reaccionado contra el proyecto de Totales Admisibles de Capturas y cuotas para 2021 en el Atlántico y el Cantábrico, “porque reduce las capturas de especies como la merluza, el gallo o la cigala en aguas ibéricas, y el lenguado en el Golfo de Vizcaya”.
