La cofradía de pescadores “Virgen de las Mareas” de Avilés tuvo en su día la concesión del surtidor de gasoil del muelle pesquero, de la fábrica de hielo y también del bar de la vieja rula. Ahora no lleva nada. En los últimos años, la Autoridad Portuaria ha ido retirándole estas concesiones administrativas, a las que se suma una más: la cofradía está llamada a marchar de las oficinas ubicadas en la primera planta del edificio de la antigua rula, en Conde de Guadalhorce. “Esta operación responde a una decisión personal de Rodríguez Vega (presidente de la Autoridad Portuaria) de echarnos de ahí, de arrinconarnos y discriminarnos”, manifestaron ayer responsables de la cofradía de pescadores. Sabedores de que el próximo 31 de diciembre expiraba la concesión, solicitaron ya en el mes de julio que se renovara esa concesión administrativa para hacer uso de las oficinas como hasta ahora.

“A mediados de noviembre recibimos como respuesta que no nos daban la concesión porque habían solicitado los locales la Policía y la Guardia Civil. A eso nosotros presentamos alegaciones, y estamos esperando respuesta: argumentamos, entre otras cosas, que seremos la única cofradía a nivel nacional fuera del territorio pesquero”, señalaron los afectados, quienes agregan: “Si es cierto como dicen que no hace falta estar en suelo pesquero, como ejemplo está la Secretaría General de Pesca en la calle Velázquez de Madrid, pero se escapa de la lógica”.

Necesidad de espacios

El máximo responsable de la Autoridad Portuaria avilesina, Santiago Rodríguez Vega, señaló ayer que el desalojo está justificado en base a la necesidad de la entidad que preside para hacer uso de locales. Además, aseveró, era conocido como la propia cofradía ha reconocido que este año finalizaba su concesión.

“Echarnos de ahí únicamente responde a un anhelo personal de Rodríguez Vega ya desde que era Alcalde de Avilés”, protestan desde la entidad al tiempo que agregan que no descartan presentar un recurso contencioso administrativo si la respuesta a sus alegaciones es contraria a sus intereses.

“Supongo que buscarán otro lugar donde poner sus oficinas”, zanjó Rodríguez Vega, como propuesta de resolución abierta al conflicto con la cofradía de pescadores “Virgen de las Mareas”.