Un total de 27 vehículos dañados, además de destrozos en ventanas de al menos cuatro pisos. Este es, según fuentes policiales, el balance del desprendimiento que alarmó el lunes festivo a los vecinos de la calle Severo Ochoa. Tras las inspecciones realizadas por los Bomberos, se mantiene como principal hipótesis del siniestro el desprendimiento del cajetón de un ascensor del tejado del número 21. Falta la evaluación de los servicios técnicos.

“Pudo haber sido una tragedia”. “Menudo susto”. “Mira cómo están los coches”. “Si llega a pasar cualquiera por aquí en ese momento, lo mata”. Lo sucedido el lunes de temporal y sus consecuencias era lo más comentado ayer en el vecindario. Algunos, desde sus ventanas, contaban lo ocurrido a sus conocidos y amigos.

El sobresalto se produjo pasadas las tres y media de la tarde del lunes. Cuando el temporal azotaba fuerte, a la hora de la sobremesa, una estructura salió volando desde el tejado del número 21 de Severo Ochoa e impactó contra la fachada de uno de los edificios de enfrente, a la altura del número 12 . El estruendo fue tal que algunos lo compararon con el estallido de una bomba.

El desprendimiento de Severo Ochoa provoca daños en 27 vehículos A.P.G.

La estructura (“Una especie de tela asfáltica”, según un testigo presencial) acabó rompiéndose un multitud de trozos que regaron la calle y que alcanzaron a casi una treintena de vehículos aparcados en zona de pago. Uno de ellos se quedó sin la luna delantera. Otros presentaban hundimientos en el capó y abollones varios. “Mira cómo ha quedado este, está destrozado”, comentaba ayer una pareja ante un turismo rojo, protegido de la lluvia con un material plástico por los graves daños en el cristal.

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Los destrozos también afectaron a varias viviendas del número 12 de Severo Ochoa. La peor parte se la llevaron los cuatro primeros pisos, con cristales y persianas rotas, entre otros daños.

“Estaba en el salón viendo la tele y escuché un ruido como si se fuera a caer el mundo. Bajé y vi todo lleno de cascotes. Mi furgoneta es una de las afectadas, pero hay un coche que tiene incrustado un trozo de lo que se desprendió en el capó. Si pasas por ahí en ese momento, te mata”, comentó tras el incidente Richard Montilla, vecino de Severo Ochoa. Afortunadamente, solo se produjeron daños materiales.