La asociación de pescadores deportivos “Volver al Pedreru”, que en su día hubo de enfrentarse, recuerdan, “a la imbecilidad de la Administración del Principado [siendo entonces presidente Vicente Álvarez Areces] y a la voracidad de los pescadores profesionales”, cuando se prohibió la pesca del pulpo y se restringió notablemente la de caña, se manifiesta ahora contra la que, a juicio es, una “imbécil decisión” también de la Administración al prohibir la pesca de la lubina (llobina) a los pescadores aficionados en la zona de Peñas, aduciendo razones para la preservación de la especie, pero permitiendo la pesca con barcos profesionales.
“Es como si para amparar los precios de la lechuga para los cultivadores de cientos de hectáreas en las huertas valenciana y murciana, se prohibiese el cultivo de las mismas en las macetas de los particulares. Los profesionales multiplican por mil las capturas de los aficionados, especialmente de los que lo hacen desde costa: ‘Pescador de vara, pescador de nada’, dice el refrán”, reflexionan desde el colectivo.
La denominada “guerra de la lubina” ha desembocado en un recurso de los pescadores recreativos, quienes consideran que la orden ministerial que ha dado lugar al conflicto esgrime unos argumentos “que no acreditan suficientemente la prohibición”.
Desde la asociación de pescadores deportivo “Volver al Pedreru” consideran que “algunas manifestaciones de los profesionales parecen dar a entender que la mar es únicamente para ellos, como si sacasen dicha razón de una interpretación ‘pro domo sua’ del Génesis I-26. Dice (traducimos): “señoread los peces del mar”: no habla de los pescadores profesionales, sino de la humanidad”, aseveran.
Y agregan que esta nueva regulación que se plantea desde la Administración carece de sentido práctico y resulta “privatizadora contra derecho y contra la Constitución”. Por ello, insisten desde “Volver al Pedreru” que el colectivo apoyará a los pescadores deportivos de la zona de Peñas y exige la retirada “de la disparatada e injusta normativa”.
