La merluza se ha consagrado como el pescado de la pandemia, al menos en la rula de Avilés. A lo largo de 2020 fueron varios los meses en los que las descargas de esta “reina de los mares” mantuvieron a flote las cuentas de la entidad. Y ha vuelto a ocurrir este mes de enero, en el que la merluza ha supuesto casi el 60 por ciento del total de desembarcos en la lonja avilesina.
Otro dato importante, el precio: la merluza se subastó el pasado enero a 5,21 euros de precio medio (a 18 euros de máximo), casi un euro por encima que en el mismo mes del año pasado. La ley del mercado hizo lo suyo –a menos oferta, mejor precio–, pero también influye que, tras los excesos navideños, los consumidores elevan el consumo de merluza en enero, y ese tirón de la demanda se traduce en mejores precios del producto en la rula.
Otra especie que ha brillado también en la rula avilesina en el último enero ha sido la bacaladilla: se rularon 81.831 kilos, algo menos que en 2020, y con el precio ligeramente por encima: a 2,85 euros de media (el precio mínimo fue de 0,18 céntimos de euro y el máximo de 7,25). En números totales, la rula de Avilés ha comenzado el año con cifras ligeramente más bajas a las registradas el año pasado por estas fechas, cuando el nuevo coronavirus aún sonaba lejano. Se ha pasado de los 636.262 kilos descargados en 2020 a los 495.112 de este año, de los cuales 294.215 fueron de merluza.
Curiosamente, la marca de calidad “Pescado de confianza” promovida por la Nueva Rula de Avilés se incorporó a finales del año pasado al sello de garantía “Alimentos del Paraíso”. Se trata del primer operador vinculado al sector pesquero que se suma al distintivo de garantía impulsado por el Principado, que permite identificar y singularizar producciones de la comunidad. En Avilés, el bonito del Norte tiene dicha etiqueta, al igual que la bacaladilla y la merluza, especie que la estrenó con éxito hace ya unos meses. Ahora ambas especies copan las descargas en Avilés a semanas, claro está, de que comience la costera de la xarda, pendiente del reparto de cupos en la región.
La marca “Alimentos del Paraíso” distingue en el mercado productos agroalimentarios que reúnen determinadas condiciones y cumplen unos requisitos específicos, que van desde la materia prima y el proceso de elaboración hasta el resultado final, de manera que garanticen su origen geográfico y su calidad certificada.
