El Ayuntamiento de Avilés no es ajeno a la accidentada puesta en servicio del bolardo automático que regula el paso de vehículos a la calle Emile Robin, recientemente peatonalizada, y consciente de que esa vía se ha convertido en un punto problemático del tráfico en la ciudad anuncia un refuerzo de la señalización vial para hacer más notoria a ojos de los conductores la nueva norma circulatoria.
En este sentido, se va a colocar dentro de unos días un segundo panel idéntico al que ya existe en el acceso a la calle Emile Robin desde la avenida de Los Telares; de ese modo, los automovilistas verán una señal tanto a la izquierda como a la derecha del sentido de la marcha. Por si esto fuera poco, existe una tercera señal en la avenida de los Telares, metros antes del cruce con Emile Robin, que prohíbe el giro a la derecha. Y pese a tal despliegue señaléctico, desde que la calle que bordea el parque del Muelle pasó a ser peatonal (con el tráfico restringido a solo los vehículos autorizados), son decenas los conductores que diariamente, por omisión, despiste o acción consciente, circulan por Emile Robin y acaban atrapados ante un bolardo que les impide el paso o, al menos en cinco casos, chocando incluso contra ese pivote.
Los conductores carentes de autorización –solo disponen de permiso de paso 1.040 vehículos– se exponen a multas de entre 80 y 200 euros (40 y 100 euros si se abonan en el periodo de pronto pago). Esas son las cantidades que gravan la comisión de la infracción de tráfico más común estos días en la calle Emile Robin: no obedecer una señal de restricción o prohibición. En función de las circunstancias de la infracción (la gravedad de la misma considerando las condiciones de tráfico), los agentes imponen multas de 80 euros o de 200. Además, la existencia de cámaras de vídeo deja constancia de cada caso.
El Ayuntamiento facilitará la carga y descarga a los tenderos de Hermanos Orbón
Las quejas de los comerciantes de la plaza Hermanos Orbón y aledaños por las dificultades de acceso a sus puestos que encontraban a primera hora de la mañana desde que entró en funcionamiento el bolardo de la calle Emile Robin parecen haber surtido efecto, pues el Ayuntamiento de Avilés asegura que “se han iniciado los trámites administrativos pertinentes para dar una solución” a esa problemática. Los tenderos hicieron ver que, a sus efectos, el horario de apertura de la barrera desde las 8.00 horas es contraproducente para el buen funcionamiento de los negocios porque los mismos deben estar abiertos a las 8.30 horas y eso requiere un trabajo previo de montaje que en algunos casos empieza a las 6 de la mañana. Es decir, que las mercancías comienzan a ser descargadas bastante antes de las 8 y el bolardo impide tal operativo. Una vez explicada la problemática al concejal de Movilidad, Pelayo García, éste se comprometió hace días a modificar la ordenanza de modo que el pivote abra antes de las 8 para los comerciantes con tiendas en Hermanos Orbón, además de ampliar la zona de carga y descarga de la calle La Muralla, que también es usada para el aprovisionamiento de mercancías de la plaza de abastos. Para hacer posible la excepcionalidad que piden los comerciantes, deberá modificarse la normativa de carga y descarga.
