La empresa Arside Construcciones Mecánicas está en concurso de acreedores. El magistrado titular del Juzgado de lo Mercantil Número 3 de Gijón así lo determinó el pasado día 18 de marzo. Esto significa dos cosas: que la empresa la dirige un administrador judicial, concretamente, Moore Stephen Fidelitas con la colaboración del despacho ovetense Gdp Concursal, y que, aunque no ha cesado su actividad, los dueños de la sociedad (Melca) han perdido la facultad de administración y de disposición de su patrimonio. De todo esto ahora se encargan las personas designadas por el juez para desarrollar el concurso.
Los primeros pasos de los nuevos gerentes judiciales de la empresa dejan clara una deuda que no alcanza el millón de euros. Esta cifra, sin embargo, puede reducirla la propia sociedad con la venta de sus activos (maquinaria mayormente) y con el ingreso del dinero por los trabajos realizados. A esto se añade el hecho de que la sociedad ya está a la venta. De hecho, los administradores judiciales tienen sobre la mesa una oferta sobre la unidad productiva.
La federación del metal del sindicato Unión General de Trabajadores (UGT) se ha personado en el concurso “para acceder a la documentación de primera mano y para defender los derechos de los trabajadores”, señalaron desde la central que detenta toda la representación sindical en la empresa auxiliar de Arcelor. “Melca quiere traspasar la empresa, deshacerse de ella”, sostienen fuentes sindicales. Y es que el conglomerado de empresas Melca es la propietaria absoluta de la compañía con sede en el polígono de Logrezana y que actualmente da empleo a 29 personas (el 60% en ERTE). Melca lleva en liquidación desde 2016.
