Castrillón es uno de los concejos pioneros en Asturias en la implantación de los contenedores marrones para la recogida de materia orgánica. El Ayuntamiento comenzó en diciembre de 2015 la campaña de recogida de residuos orgánicos. Los primeros contenedores se instalaron en Salinas. En 2016, la iniciativa se amplió a Raíces Nuevo, en 2017 a Coto Carcedo y en 2019 a Piedras Blancas. En 2020 se recogieron en el concejo un total de 120 toneladas de residuos orgánicos depositadas en los contenedores marrones, según señaló el concejal de Obras y de Medio Ambiente, Iván López. El concejo recicla en total (contenedores azules, verdes, amarillos y marrones) un 15 por ciento de la basura total que produce al año. El menor reciclaje se da en la materia orgánica.
El destino de los residuos de materia orgánica es la biometanización para obtener biogás y compost. En diciembre de 2013 se puso en marcha en las instalaciones del Consorcio para la Gestión de los Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) la planta. En Piedras Blancas hay 20 contenedores marrones, en Salinas 25, en Raíces Nuevo 11 y en Coto Carcedo 8. Unos depósitos que sólo son utilizados por un 10 por ciento de la población que reside en esas localidades. En el primer trimestre de este año, en los 64 contenedores marrones ubicados en las zonas urbanas del concejo, se recogieron unas nueve toneladas de materia orgánica.
Los vecinos interesados en depositar biorresiduos domésticos o comerciales en los depósitos marrones tienen que solicitar una tarjeta gratuita en el Ayuntamiento que les permite abrir los contenedores, un sistema que garantiza que sólo se depositen residuos orgánicos. “La inscripción para pedir las tarjetas se pueden solicitar en el Ayuntamiento, en Piedras Blancas, en las instalaciones municipales del servicio de Obras, en Arnao o llamando al teléfono 985530320. Para facilitar el reciclado en las viviendas, junto con la tarjeta de apertura del contenedor se entrega un cubo marrón de diez litros de capacidad”, explicó Iván López.
La concejalía ha puesto en marcha una nueva campaña de concienciación de los ciudadanos con la instalación de carteles informativos en los mupis municipales. En los contenedores, metidos en bolsas de plástico como las que se utiliza para los residuos que se depositan en el cubos verde de basura, se pueden meter restos de carne, pescado, pan, galletas, cáscaras de huevos, posos de café, bolsitas de infusiones, tapones de corcho, frutas, frutos secos, flores, en fin todos los residuos orgánicos. “Los vecinos tiene que animarse a utilizar este servicio”, manifestó el concejal.
