Casi todos cruzaron el furioso Atlántico en busca de una vida mejor: unos, lo lograron; otros, no. De aquellos viajes ultramar han quedado construcciones en Asturias, las conocidas como "casonas indianas", el eco de negocios en su día florecientes, canciones e, incluso, costumbres heredadas del "otro lado del charco". Y también muchas historias, porque el Atlántico que unió muchas familias también fue testigo de la separación de infinidad de personas, muchas asturianas. Es el caso de los descendientes de José María Peláez Rodríguez, un corverano de Trasona nacido en 1858 que ahora urgen ayuda para contactar con los familiares de su abuela paterna.

"Mi bisabuelo, José Maria Peláez Rodríguez , nació en el barrio de Mocín el dia 2 de julio de 1858. Hijo de Nicolás Peláez y Florentina Rodriguez , emigró a Cuba, a Quemado de Guines, Villa Clara, en la primera década del siglo pasado junto a su esposa Petronila Gutiérrez Menéndez y sus hijos, Celestino Nieves y Maria Benita, mi abuela. Todos fallecieron en Cuba. Mi deseo es mantener correspondencia con algún familiar de mi padre que viva en Asturias", pide Clarivel García Cedeño, que confía en los descendientes indianos de Corvera para dar con los suyos.