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Vero Rodríguez, remera paralímpica : “El Nalón secó todas mis lágrimas”

La sotobarquense recibe el respaldo de sus paisanos antes de partir con la Selección a Tokio

Vero Rodríguez, remera del Nalón

Vero Rodríguez, remera del Nalón

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Vero Rodríguez, remera del Nalón Myriam Mancisidor

Vero Rodríguez Pulido sonríe. Lo hace siempre. Y ahora con más fuerza, tiene razones para ser feliz: la de Soto del Barco participará en los Juegos Paralímpicos de Tokio. Competirá los días 27, 28 y 29 de agosto. En su bolsillo tiene ya un Campeonato de España de remo adaptado y también el “oro” en la regata de chalanos del Castillo. Porque todo cuenta. Para Rodríguez, aquella competición folixera en su Nalón del alma fue la puerta al olimpismo. Era 2017.

–Convencí a un par de amigas y participamos, ¡lo hicimos fatal, fatal! Llegamos las últimas, dimos tres vueltas sobre nosotras mismas.... –, relata sin tapujos.

Al año siguiente, Rodríguez volvió al Castillo, a la regata de chalanos. La cosa fue mejor. En cada palada tenía muy presente a su madre, Maige Pulido, que había fallecido repentinamente unos días antes cuando se dirigía en moto a Zamora. Por ella tiró rosas blancas al Nalón. Desconocía entonces que ya le habían echado el ojo.

“A los chalanos vino a competir el Grupo Corvera de Remo, me vio el entrenador y me propuso empezar a remar en su club. Así lo hice y desde entonces entreno sin descanso, antes y después del trabajo; y aquí estoy”, manifiesta la joven sotobarquense, que ayer fue homenajeada por sus paisanos en un acto liderado por el alcalde, Jaime Menéndez Corrales, en el salón de plenos del Ayuntamiento, con la corporación al completo.

Para los de Soto, Vero Rodríguez vale su peso en oro. Nació con parálisis cerebral y ahora, a sus 33 años, es un ejemplo de superación. Estudió Magisterio de Educación Infantil, trabaja en la ONCE y colabora con la comisión de festejos de Soto del Barco. Es folixera sobresaliente, de esas fieles al Xiringüelu, y una mujer muy querida por sus paisanos tal vez por esas espontaneidad que le caracteriza.

–Cuando en agosto del año pasado me convocaron para la Selección Española, al llegar todos hablaban de su palmarés... ¡Yo tuve que decir que era campeona de chalanos en mi pueblo!– exclama.

La intención del gobierno local sotobarquense es seguir las paladas de Rodríguez durante su estancia en Tokio. Tal es así que Corrales tiene previsto ofrecer retransmisiones de las competiciones en el teatro Clarín de Soto. Ayer, además de un fuerte aplauso, Verónica Rodríguez se llevó de los suyos una bandera del concejo que lucirá en el país asiático. “En esta bandera llevas el respaldo de 3.800 vecinos”, recalcó Corrales. Rodríguez no pudo evitar emocionarse. “Para nosotros es honor muy grande que un vecino pueda representar a España en los Juegos Paralímpicos”, dijo el Alcalde, que calificó a Rodríguez como “una persona entregada, siempre con una sonrisa y dispuesta a colaborar con todo el mundo”.

Rodríguez aseguró que su intención en Tokio es dar lo mejor de sí misma: “Llegar hasta aquí ha supuesto mucho sacrificio, pero en el agua yo soy feliz”. Se emociona cuando explica los beneficios que la práctica deportiva conlleva para un discapacitado: “Yo quería hacer algún deporte, pero hasta que participé en el campeonato de chalanos de El Castillo no tuve claro que lo que me gustaba de verdad era el remo”.

Porque el remo es más que un deporte para esta sotobarquense: “El remo es mi psicólogo y el río Nalón ha secado muchas veces mis lágrimas”, confiesa. Porque Verónica Rodríguez también llora, aunque ahora está en tiempos de ser feliz. Le espera Tokio, en agosto. Soto vibrará con su estrella paralímpica que, haga lo que haga en la competición, ya tiene la rendida admiración de sus paisanos. Porque lo suyo es un ejemplo de superación a paladas.

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