“El Servicio de Atención Ciudadana sufre ahora un estado de abandono como consecuencia de la reorganización que se está llevando a cabo”, señaló ayer Agustín Medina, concejal del grupo municipal Cambia Avilés, la confluencia de Podemos y de Izquierda Unida.

Explicó que “ahora” la atención al ciudadano tiene que estar en manos de trabajadores funcionarios. “Esto implica que de las ocho personas que había, ahora sólo haya dos”, señaló Medina. “Esto ha creado unas listas de espera de hasta quince días”, añadió el concejal que echó la vista atrás y señaló que la situación en que se encuentra la atención ciudadana se debe a la decisión del gobierno municipal de fusionar la Oficina de Apoyo al Registro (OAR) y el Servicio de Atención Ciudadana (SAC) y hacerlo, además, por medio de “un concurso provisional en comisión de servicios por dos años con el fin de cubrir las plazas”, explicó Medina. “Lo que sucede es que sólo se presentaron dos personas. Quizá si hubieran hecho un concurso de traslados en condiciones hubiera venido más gente”, explicó Medina.

Cambia Avilés denuncia la “falta de previsión”. Y es que, según el concejal, “antes de acometer todas estas reformas que, posiblemente, sean necesarias, el gobierno lo que tendría que haber asegurado es que tuviera gente para cubrir las plazas del servicio del personal no funcionario que se tiene que ir”, indicó el concejal Medina.

Personal

En paralelo a esta situación, el edil de Cambia Avilés también reclamó al gobierno que abra las puertas de la política de personal a los grupos de oposición. “Legalmente, el Reglamento no contempla esta posibilidad. Planteamos reuniones de cualquier tipo: con voz, pero sin voto; simplemente, sin voz... Lo que reclamamos es poder estar presentes”, explicó el concejal. “Necesitamos estar presentes”, insistió.