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El oficio de pisar la calle

La esencia de la profesión al cumplir tres décadas LA NUEVA ESPAÑA de Avilés: extremar el rigor, buscar fuentes originales y comprobar los datos

Corsino Nuño compra el periódico a Eduardo Miranda

Una de las grandes lecciones que nos han dado las sucesivas crisis con las que se ha empeñado en azotarnos la nueva centuria es que algo no ha cambiado, al menos en lo fundamental, en el oficio del periodista. Su labor consiste en pisar la calle, en andar y contar, por decirlo a la manera de Chaves Nogales. Saber contar, por supuesto, resulta fundamental, pero ese desplazamiento es parte esencial del proceso.

Con ese mismo planteamiento se abría hace tres décadas la edición de Avilés y Comarca de LA NUEVA ESPAÑA y, con el mismo ánimo de andar y contar, renovamos este 2021 la confianza de nuestros lectores. En un momento en que la primacía de las nuevas tecnologías, los gabinetes de comunicación institucionales y empresariales –también la televisión e internet– se empeña en marcar las agendas del que algunos consideramos todavía hoy que es el oficio más bonito del mundo, se hace más necesario que nunca ese desplazamiento, el contacto con la cotidianidad. El lector de nuestra comarca quiere que le cuenten lo que ocurre alguien que le conoce, si no de primera mano, casi. La imbricación con el territorio ha sido desde los inicios de esta edición una de las marcas de la casa. Hemos estado presentes, anduvimos y contamos, una sucesión de crisis y de negros acontecimientos que con el paso del tiempo se transformaron en celebradas adaptaciones a nuevas realidades. Hemos intentado leer en la realidad aquello que no estaba dicho, que no era tan obvio y también hemos alimentado las historias con la curiosidad que nunca debe perder un periodista. No trabajamos para nosotros, sino para nuestros lectores, con vocación de servicio, para contribuir a un enriquecimiento mutuo.

Un hombre sale con un ejemplar de LA NUEVA ESPAÑA de un quiosco de Avilés. | M. Villamuza

El periodismo ha ocupado su lugar en este territorio de la mano de LA NUEVA ESPAÑA y ha adquirido también en estas tres décadas de historia de la edición de Avilés y Comarca la importancia y el lugar que le correspondían de pleno derecho. El periodismo nuevo o el nuevo periodismo nunca ha abandonado la esencia de lo que es: tratar de contar lo que uno ha visto y oído, ni más ni menos, y sin bajar la guardia ante la menesterosidad de la verdad. Podría considerase ya un pilar imprescindible en una democracia liberal y, desde LA NUEVA ESPAÑA de Avilés, aspiramos a mantener viva la llama de este oficio –el de andar y contar–, pese al complejo contexto en el que nos encontramos tras la pandemia del último año y medio.

Una parte del relato que hemos completado estos treinta años podrá verse a partir del próximo 5 de agosto en el palacio de Valdecarzana, donde permanecerá abierta al público una exposición para conmemorar esta efeméride hasta el día 27, víspera de San Agustín. La muestra, que esperamos llevar a otros lugares de la comarca, consta de una serie de paneles en los que, divididos por quinquenios, se repasan algunos de los acontecimientos más importantes narrados por LA NUEVA ESPAÑA de Avilés y Comarca entre 1991 y 2021. En ellos se podrán contemplar algunas de las portadas más relevantes. Basándonos en nuestra experiencia hasta hoy podemos concluir que la esencia del oficio continua siendo la misma: extremar el rigor, buscar fuentes originales y comprobar todos los datos. ¡Vamos a por otros 30!

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