La competición de surf adaptado puso ayer el broche de oro a la decimonovena edición del Salinas Longboard Festival. “Hay buen ambiente y estamos muy a gusto, venimos a pasarlo bien”, señaló uno de los participantes, Christians Alonso, a quien le dio tiempo a hacer amigos en la última edición del festival, en el año 2019.
Alonso tuvo hace 11 años un accidente de tráfico que le causó una lesión en el tren inferior del cuerpo y practica surf desde hace cuatro años para “pasar un buen rato”.
Uno de los amigos que Christians Alonso hizo en Salinas es Marcos Tapia, otro de los participantes de esta modalidad de surf. “Practico surf adaptado desde hace cinco años y estoy encantado, me da una libertad y una alegría muy grandes”, afirmó el canario, a quien el accidente de tráfico que le provocó la lesión modular que padece no impidió que abandonase su amor por el mar y las olas.
“Hoy (por ayer) es la primera vez que compito en Salinas. Es muy especial para mí porque, aunque me inicié en el surf aquí, es la primera vez que vengo a competir”, detalló Ángel Luis Curiel, quien participa en estas competiciones ayudado de una tercera persona, ya que su modalidad requiere que entre al mar tumbado en la tabla y otra persona le ayude en el mar.
Curiel contó que la primera vez que estuvo en Salinas fue gracias a un amigo, con el que vino a ver el ambiente del festival y los conciertos. “Me animé a probar el surf e hice un ‘recto’ la primera vez que me metí en el agua, aquí en Salinas”.
Desde entonces, ha ganado el campeonato de España y el mundial de surf adaptado con la selección española. El vallisoletano Juan Carlos Curiel es el claro ejemplo de superación. Tras quedar tetrapléjico en un accidente en Galicia, en el que una mala caída al mar le hizo perder toda la movilidad de su cuerpo de cuello para abajo, consiguió ir recuperándose poco a poco. Hasta ser campeón de surf en modalidad S5-asistido.
La quinceañera María Martín-Granizo compitió ayer por primera vez con una prótesis en su pierna izquierda. “Nunca antes había practicado surf con la prótesis, solo he entrenado llevándola puesta unos días antes”, explicó la leonesa.
Su compañera Paloma Oñate, estrenó tabla en la competición de ayer. “Lo haré lo mejor que pueda. Vivo en Madrid y no he podido entrenar mucho, pero las sensaciones son buenas”, aseguró la tinerfeña antes de entrar al agua. “Estamos intentando fomentar la inclusión en el deporte y dar visibilidad a esta categoría del surf”, explicó Marcos Tapia, porque “el deporte puede practicarse dentro y fuera del agua”.
