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El coste del sistema de depuración de la ría de Avilés supera en el último año los 3,5 millones

Las reparaciones y obras ejecutadas para cubrir las deficiencias de la planta de Maqua alcanzan casi cuatro millones de euros en seis años

La cúpula de la EDAR de Maqua, apuntalada. Ricardo Solís

Los costes del sistema de saneamiento y depuración de la ría de Avilés ascendieron en el último año hasta los 3,54 millones de euros. De esta suma, más del 38% se fue en 2020 a sufragar gastos de mantenimiento y reparaciones de la depuradora de Maqua, pendiente de una reforma millonaria desde hace años y que sufre un problema endémico desde su construcción por las filtraciones de mar y una atmósfera industrial agresiva. Esa cantidad anual la aporta la Junta de saneamiento y procede del impuesto de afecciones ambientales. Las reparaciones e inversiones acometidas desde 2014 para cubrir las deficiencias del sistema de depuración del estuario avilesino se acerca a los cuatro millones de euros (exactamente 3.970.501,18 euros).

Mientras espera por la reforma millonaria, la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de la comarca avilesina se ha convertido en un pozo sin fondo. Funciona los 365 días del año y para mantenerla en marcha en condiciones de seguridad requiere de inversiones constantes.

En el bienio 2014-15, cuando hubo que reforzar la estructura de la cúpula porque amenazaba derrumbe, se gastaron en reparaciones y mantenimiento 772.456 euros. El mayor paquete de actuaciones en volumen de gasto se ejecutó entre 2016 y 2017, por valor de 1,75 millones. Entre otras actuaciones, hubo que acometer mejoras en el túnel bajo la ría, modificar las coronas de los decantadores de la depuradora, sustituir pedestales y eliminar tubos guía del pozo de agua bruta, así como realizar una limpieza extraordinaria del colector interceptor del Tuluergo.

En 2018 se superaron los 630.000 euros en reparaciones (buena parte de esta cantidad total se fue para la sustitución de tamices y para obras de renovación centrífuga de la depuradora) y en 2019 la cifra bajó hasta los 144.016 euros.

El año pasado hubo que comprar varias bombas (entre ellas una para el reactor biológico), renovar los componentes clasificadores de arenas de la depuradora, realizar reformas varias en el edificio de fangos... en total, la factura alcanzó los 670.871,26 euros.

De ese presupuesto total de 3,54 millones del saneamiento y depuración de Avilés de 2020, 1.139.634 euros se destinaron al pago de la electricidad, 670.871 a las reparaciones previamente citadas, 704.665 euros a mantenimiento, 655.797 euros a personal y 376.863 euros.

La reforma que pide a gritos la depuradora de Maqua desde hace años, que además incumple la normativa comunitaria por no tratar convenientemente las aguas residuales, está ahora en el aire por un bloqueo en la licitación del proyecto y obra pendiente de solución.

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