“En la Bretaña Francesa todas las mujeres utilizan estos bordados en malla. En cada pueblo son diferentes y consiguen que perviva la tradición, aquí luchamos para que no desaparezca”, señalaba José Ramón García, director del Museo Marítimo de Asturias, en Luanco.
“Esta labor es muy antigua, que da viva en pocos más sitios que en Luanco, para el museo es muy importante establecer estos lazos”, añadía. Ayer tuvo lugar un encuentro entre “Musée du Filet Brode”, de la mano de Luisa Danigo, con las malleras del taller de Amas de Casa de Luanco, para intercambiar experiencias y ver analogías y diferencias entre ambas formas de realizar el encaje de mallas. Este ha sido el primer contacto internacional de la Malla de Luanco, subrayaron, orgullosas, las participantes.
El “Musée du Filet Brode” está situado en el pequeño pueblo de Plouenan, en la Bretaña Francesa. Conserva y transmite la tradición de la malla bordada en el país vecino. El museo bretón tenía un especial interés en conocer la forma de tejer en Luanco.
La asociación “Ijin ha Spered ar Vro” inauguró el museo francés en 2006. Una galería pequeña y exclusiva. Su misión es resguardar y transmitir la técnica de la red anudada y bordada similar al encaje. Enseña también la tradición a las nuevas generaciones. En la Bretaña francesa los tejidos de encaje tienen mucho uso. Los grupos folclóricos lo llevan en sus vestimentas.
Durante el verano, amantes del bordado de toda Francia se desplazan hasta el museo situado en Plouenan para iniciarse y mejorar sus técnicas, además estos visitantes también pueden ver la exposición de los vestidos los tocados que usan las mujeres en ocasiones especiales.
