Avilés amaneció ayer mirando al cielo y los peores pronósticos se cumplieron: las fuertes lluvias unidas a la pleamar de las 12.18 horas hicieron que la calle de Llano Ponte se transformara en un afluente de la ría. Los comerciantes, hartos de achicar agua, lamentaron: “Llueve sobre mojado”. Ayer fue la quinta vez que se inundaban sus negocios desde 2015, aproximadamente desde que finalizaron las obras de reurbanización de la vía, a la que achacan todos los males. Los técnicos, sin embargo, niegan tal culpa. Consideran que la obra llamada a acabar con las inundaciones en la calle Llano Ponte pasa por la reforma del aliviadero del colector del río San Martín, una actuación que acumula años de retrasos. La alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, que ayer visitó la zona más afectada por el agua y departió con los comerciantes, avanzó que la previsión es que este año se adjudique la obra y comience en 2022. 

Esta actuación forma parte del listado de inversiones de saneamiento y depuración que se ejecutarán en Asturias con cargo a las ayudas “React” de la Unión Europea. Se trata de una actuación a ejecutar en varios ejercicios y la anualidad reservada para este año asciende a 250.000 euros. El presupuesto total supera los dos millones de euros. La Consejería ya tiene la autorización de Adif que esperaba para acometer la obra y está preparando el expediente administrativo para encargarlas. Si bien ayer se dio el cóctel perfecto para que se inundara Llano Ponte hubo un ingrediente extra más: “Coincidiendo con el aumento de caudal de agua por las abundantes precipitaciones se ha producido un fallo en la Estación Depuradora de Aguas Residuales de Maqua. Tras el análisis de la situación llevado a cabo por personal técnico municipal, y dado que los datos de precipitación no han llegado a los niveles de otros incidentes similares, se puede concluir que las inundaciones sufridas en Llano Ponte han sido el producto de la coincidencia en el tiempo de la Pleamar (3,14 metros a las 12.01 horas) con la punta de precipitación y con el fallo registrado en la EDAR de Maqua”, subrayaron fuentes municipales. 

En la calle de Llano resultaron afectados vecinos, comerciantes y también cientos de conductores que utilizan esta vía, una de las principales salidas de la ciudad. El tráfico, cortado para reducir el “efecto ola” de los vehículos durante aproximadamente una hora, quedó reabierto hacia las 13.00 horas. Operarios de Aguas de Avilés comprobaron a su vez el estado de las arquetas verificando que no se encontraban obstruidas. También tuvo que ser cortado al tráfico el puente de El Reblinco. Fue necesario cortar asimismo el tráfico de vehículos en la travesía del Cristal, desde la avenida de Lugo hasta la travesía de la Industria, sin que se registrara ninguna incidencia reseñable. 

Además de las ya mencionadas, la Policía Local de Avilés tuvo conocimiento de las siguientes incidencias: daños materiales sufridos por un vehículo que circulaba por una de las calles del polígono de la ría tras introducir una rueda en el hueco que dejó al aire una tapa de registro, levantada por la fuerza del agua, acumulación de agua en la avenida de Lugo y en la Travesía de la Industria así como en José Cueto, la plaza del Vaticano o la plaza de los Oficios. Los bomberos intervinieron a su vez en una empresa en la Travesía de la Industria también anegada. En otros puntos de la comarca también se registraron pequeñas inundaciones pero la peor parte se la llevó Llano Ponte.