El gobierno local avilesino (PSOE) aspira a que el Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) de Avilés forme parte de una red nacional de centros de excelencia. El Ministerio de Educación ultima una convocatoria con fondos europeos en concurrencia competitiva de la que se beneficiará un número reducido de equipamientos del país. El gobierno local, que tiene en su hoja de ruta el fortalecimiento de la FP, colaborará para que el centro avilesino presente proyecto a esa convocatoria para conseguir esa certificación de excelencia. El reto no es sencillo. Según las fuentes consultadas, las previsiones del Gobierno central pasan porque haya un centro de excelencia por provincia, como máximo. Así las cosas, Asturias aspiraría en esta convocatoria a contar con solo un centro de estas características.
El objetivo de esta iniciativa, que se enmarca en el plan de modernización de la Formación Profesional, es que estos centros de excelencia trabajen en los distintos sectores con las empresas de su entorno y puedan trasladar los proyectos de éxito y la innovación educativa a otros institutos. El Ministerio de Educación está definiendo los criterios concretos de la convocatoria, que está previsto lanzar antes de que finalice el año. Lo que ya avanzó la secretaria general de Formación Profesional, Clara Sanz, hace unas semanas en una entrevista radiofónica es que los aspirantes tendrán que ser centros públicos que tengan toda la oferta de Formación Profesional, tanto la educativa como la formación para el empleo. El centro avilesino cumple estos requisitos. “Han de ser centros que tengan muy integrada la innovación, que estén muy vinculados al desarrollo regional y que contribuyan a los que son las políticas regionales de especialización inteligente que realmente ahora mismo es lo que cada comunidad autónoma está decidiendo y lo que promueve Europa”, dijo Sanz en una entrevista a la Cadena Ser.
El tejido empresarial lleva alertando desde hace años que la oferta educativa no se adecua a las necesidades reales de mano de obra de las empresas e industrias de la comarca, un déficit que se ha visto agravado con la transición energética y la digitalización de los procesos productivos. Los centros de excelencia buscan ser referentes en este sentido y Avilés, como polo industrial que es, quiere estar a la vanguardia de esa transformación de la FP en ciernes.
