“El bolsillo de los trabajadores de la industria auxiliar no es un fondo covid más del que la patronal pueda echar mano para sacar sus beneficios para los próximos años”. Con estas palabras Damián Manzano, secretario general de CC OO de Industria de Asturias, justificó esta mañana el calendario de movilizaciones en el sector y que incluye una concentración ante la sede central de Femetal (la patronal del sector del montaje) y nueve días de huelga en enero (11, 12, 13, 18, 19,20, 25,26 y 27 de enero próximo).

Jenaro Martínez Paramio, el secretario general de FICA-UGT, explicó: “No es de recibo que, por la cerrazón de las empresas, no hayamos sido capaces de un lograr un convenio digno”. Y es que la propuesta de Femetal “es diez veces inferior al IPC de noviembre”, es decir, la patronal ofrece para el primer año de convenio (2022) una subida del 0,5 por ciento cuando el coste de la vida está ahora en un 5,5 por ciento.

Los trabajadores plantean un convenio a dos años con subidas de un 2,5 cada año con cláusula de revisión. Esta no está en la propuesta de las empresas. “El sector se encuentra en muy buenas condiciones, con una muy buena carga de trabajo y con proyectos de futuro que, seguramente, le darán al conjunto de las empresas auxiliares buenos beneficios”, añadió Paramio. “Emplazamos a Femetal y a las empresas afectadas a negociar de buena fe”, señaló Manzano, que participó en la rueda de prensa de manera telemática.

Los dos líderes sindicales destacaron su voluntad “a iniciar las negociaciones”. “Tuvieron un año para llegar a un acuerdo y ahora tienen 11 días, prácticamente, para el primer día de huelga”, explicitó Manzano. Tanto él como Paramio recordaron que los trabajadores aceptaron “en 2020” la congelación salarial “en un ejercicio de responsabilidad” y, en consecuencia, reclaman a la patronal que la ejercite este año. Los trabajadores advirtieron que no tienen intención de aceptar que las empresas mantengan su “voluntad de seguir mareando la perdiz”.