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El acusado de intentar matar a su pareja en Luanco se enfrenta a 15 años de cárcel

El hombre, que está preso en Lugo desde su detención, asestó varias cuchilladas a la mujer el mismo día que se dictó la orden de alejamiento

Maltrato

Acuchilló a su mujer en abril de 2020 –en pleno confinamiento por la epidemia de covid– al grito de “te mato, te mato” pocas horas después de que le fuese impuesta una orden de alejamiento tras denuncias previas por maltrato. La víctima sobrevivió providencialmente porque atinó a cubrirse con los brazos, porque el cuchillo usado en el ataque, de 19 centímetros de hoja, era de sierra y carecía de punta y porque un hombre que pasaba por la calle oyó los gritos de socorro y logró reducir al agresor. El presunto autor de este intento de homicidio en grado de tentativa huyó y fue pillado en la provincia de Lugo, en cuya cárcel de Bonxe se halla desde entonces en régimen de prisión comunicada y sin fianza.

Ahora ha llegado el momento de impartir justicia, para lo que esta mañana está previsto que se celebre en la sección tercera de la Audiencia Provincial de Oviedo un juicio en el que la Fiscalía pide para el procesado penas que suman quince años y nueve meses, además de más de 50.000 euros por responsabilidad civil (lesiones, secuelas y daños morales).

La Fiscalía del Principado de Asturias, sección territorial de Avilés, sostiene que el procesado mantuvo una relación sentimental con la víctima del intento de homicidio desde el año 2002, con un hijo en común. Desde el comienzo de la misma, defiende el ministerio fiscal, “dio muestras de un comportamiento violento con su compañera sentimental y se dirigía a ella con expresiones como ‘hija de puta; eres una puta mierda; no vales para nada; eres una puta; estás loca; quién cojones te crees...’”

El procesado, prosigue la acusación pública, controlaba y limitaba las relaciones de la mujer con terceros y con sus familiares, con el objetivo de mantenerla aislada y bajo su dominio. Imponía su voluntad y criterio, no solo en las decisiones que afectaban al núcleo familiar sino también en el plano profesional y económico, en relación al negocio que regentaban en Luanco (Gozón).

El carácter de la mujer se fue transformando paulatinamente en los últimos años, haciéndose más introvertida y menos social. Su vida se redujo a trabajar y sus únicas salidas eran en compañía del procesado. Como consecuencia de la situación de conflictividad que vivía la pareja, la mujer presentó problemas de ansiedad que requirieron apoyo psicológico y farmacológico. Por todo eso, se planteó en reiteradas ocasiones romper la relación sentimental con el procesado, si bien desistió por las continuas amenazas de perder la custodia del menor.

En agosto de 2019, en el domicilio familiar, el procesado quiso mantener relaciones sexuales y, ante la negativa de su pareja, la cogió por el cuello y la tiró contra el colchón, aplastándole la cabeza y apretándole los brazos con fuerza, ocasionándole hematomas. El 8 de marzo de 2020 se inició una discusión en el domicilio familiar en presencia del hijo de la pareja, después de que el procesado le pidiera el móvil a la mujer y esta se negara a entregárselo; el procesado la tiró contra la cama y le aplastó la cabeza contra el colchón, causándole varios hematomas.

El 12 de marzo, la mujer interpuso denuncia, dictándose al día siguiente una orden de protección integral, que se acordó imponer cautelarmente al procesado la prohibición de aproximarse a menos de 200 metros del domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro frecuentado por ella, así como la prohibición de comunicarse por cualquier medio. A pesar de tener conocimiento de las medidas impuestas, el procesado en varias ocasiones y de diversas formas.

Por auto de 25 de abril de 2020 del Juzgado de instrucción n.º 5 de Avilés se le impuso al procesado, junto con las prohibiciones de aproximación y comunicación vigentes, la de acudir o residir en la misma localidad de Gozón que su mujer. Ese mismo día, prosigue la Fiscalía, tras abandonar las dependencias del Juzgado, “el procesado se dirigió al negocio regentado por su pareja y una vez allí se acercó a la mujer, iniciándose un forcejeo entre ambos, en el curso del cual el procesado cogió un cuchillo que se encontraba en la parte interior del mostrador, y al tiempo que le decía ‘te mato, te mato’ le propinó diversas cuchilladas”. El procesado fue detenido en Lorenzana (Lugo) decretando un Juzgado de Mondoñedo su ingreso en prisión el 26 de abril de 2020. El procesado tendrá hoy ocasión de dar su versión de los hechos ante el tribunal que lo juzgará.

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