Más de 1.800 estudiantes de Avilés se han apuntado a la fiesta musical que han formado los teatros Palacio Valdés y Nacional de la Zarzuela los días 24 y 25 de este mes de marzo (a las 10.00 y a las 12.00 horas). Será cuando la compañía del Proyecto Zarza represente el sainete arrevistado de Jacinto Guerrero “El sobre verde”, un espectáculo reescrito por el dramaturgo Álvaro Tato que cuenta con la dirección escénica de Nuria Castejón y con la batuta de Cecilia Bercovich.
La compañía del Proyecto Zarza reserva las cuatro primeras funciones para los escolares de los centros educativos Paula Frasinetti, Santo Ángel, San Fernando, San Nicolás, Santo Tomás y Principado y los institutos públicos Carreño Miranda, La Magdalena, Número 5, Menéndez Pidal.
La función última, la del sábado a las 20.15 horas, estará reservada para el público general. Porque el Proyecto Zarza aparte de llevar el musical más castizo a las aulas quiere devolver al escenario avilesino las partituras de la edad dorada española y es que el Palacio Valdés hace años que se había apartado de óperas y zarzuelas.
El Proyecto Zarza iba a haber sido la cita mayor del fallido y pandémico centenario del Palacio Valdés (en 2020). Sin embargo, la alianza sellada entre el odeón avilesino y el madrileño, que dirige Daniel Bianco, quedó grabada a fuego. Y es que la escenografía de “Agua, azucarillos y aguardiente” (el Proyecto Zarza de hace dos años) estaba montada sobre el escenario avilesino cuando el Gobierno de España estableció el primer Estado de alarma. Y se quedó a dormir en Avilés los tres meses de encierro por coronavirus.
El teatro de la Zarzuela decidió en 2017 producir un clásico destinado al público ajeno del género musical. En la lista están “El dúo de la africana”, “La verbena de la Paloma”, la fallida “Agua, azucarillos y aguardiente” (se vio en Madrid, aquí, en Avilés, no). La manera de llevar a cabo este proyecto es singular: los espectáculos no tienen que durar más de 70 minutos, pese a ello, el espectáculo respetará la partitura, aunque el libreto se podrá actualizar con el fin de hacer asequibles textos centenarios para espectadores poco acostumbrados.
Todo esto con una compañía formada exprofeso por actores y cantantes menores de 30 años y con una orquesta de cámara (de entre cinco y diez músicos). A los primeros los dirige Nuria Castejón y a los segundos, Cecilia Bercovich. La iluminación la firma Juanjo Llorens y el vestuario es obra de Gabriela Salaverri.
