Sonó Gustavo Adolfo Bécquer, Guillermo Carnero, sonaron poemas en la boca de varios alumnos de Secundaria de los institutos avilesinos, en la voz de varios componentes del club de lectura de la Biblioteca Bances Candamo y hasta de dos concejalas (Yolanda Alonso, concejala de Cultura, y Carmen Pérez Soberón, de Ciudadanos). Teresa Pasarín, la directora de la Red de Bibliotecas de Avilés, presentó el homenaje avilesino a la poesía, en el día Internacional de los versos, en la reivindicación de “Asturias, capital mundial de la poesía”.
Los lectores de este maratón de poesía salían con libros en la mano, pero también con folios y muchos, con las pantallas de sus smartphones en plena ebullición. Mayormente, versos en castellano, pero también en asturiano. Poemas de amor y también bucólicos. La poesía es tan amplia como quieran sus lectores.
Pero la fiesta en Avilés siguió en escenarios tan dispares como el salón de actos del Centro de Servicios Universitarios (Natalia Menéndez presentó “Calibán”, su última obra, junto a Rebeca Fernández y Luz Mar González-Arias). En los salones de hotel 40 Nudos hubo otra presentación: de lo último de Agustín Alonso Biscayar (“Cartografía de la oscuridad”). En La Luz también hubo poesía. Como en el Valdecarzana: en honor a Luis Miguel Rabanal.
