Los “grandes donantes” de Avilés son seis hombres que en el año 2020 habían superado las 75 donaciones de sangre, según el registro del colectivo que preside Carlos Vigil. Ayer todos ellos –Eleuterio Rodrigo Juan, José Luis Carrión, Antonio Carbelo, José Miqueas Marqués Cuena, Jesús Manuel Pose Pombo y Fernando del Río– recibieron de manos de la concejala de Ciudad Saludable, Lucía Fernández Ron, unos diplomas que distinguen su generosidad.
El acto estaba programado para el año 2020, pero debió congelarse debido a la crisis sanitaria. Aunque ayer fueron tratados como héroes, los avilesinos quitaron hierro al homenaje: “Donar cuesta muy poco, es una forma muy sencilla de colaborar. No tiene mérito”, sentenció Eleuterio Rodrigo, que, como el resto de homenajeados, animó a los más jóvenes a poner el brazo: “Como digo es algo muy sencillo, supone invertir quince minutos”.
Jesús Manuel Pose Pombo es otro de esos donantes que, con su aportación, hace posible que el mundo siga latiendo. “Me hice donante básicamente porque creí que era una buena forma de ayudar al colectivo y de obligarme a cuidar de mi salud. Creo que lo estoy consiguiendo”, señaló, al tiempo que lanzó un mensaje a los que sopesan donar sangre pero todavía no lo han hecho: “Recomiendo que donen porque es lo más básico del ser humano y ayuda a potenciar otros valores como la generosidad o la humildad”.
Antonio Luis Carbelo Caballero se hizo donante casi por casualidad: “Fue en la ‘mili’ para escaquearme. De aquella daban un bocadillo y una cerveza”, confiesa. Más adelante siguió en Madrid: “Pagaban”. “Aquí en Asturias ya lo vi como un servicio imprescindible y muy necesario”, sentencia. Sus hijos son donantes desde que cumplieron la mayoría de edad. “Recomendaría a los jóvenes que piensen que algún día pueden necesitar sangre tanto ellos como sus familiares, por eso donar es bueno, tanto para el que dona y el que recibe”.
José Miqueas Marqués Cuena es como osé Luis Carrión otro gran donante de Avilés. Decidió regalar su sangre “porque no supone ningún esfuerzo y genera gran satisfacción”. “Creo que llevo donando treinta años sin fallar ni una sola vez”, apunta. A los generaciones que vienen detrás les dice: “No supone nada, entre quince minutos y media hora de tiempo, nada más. Además las agujas cada vez son más finas y el mínimo dolor del pinchazo cada vez es menor”. Fernando del Río también animó a donar. Él, con el carnet de donante 10.001, dio el salto allá por los setenta del siglo pasado a raíz de una intervención quirúrgica de su padre. Nunca lo dejó.
Ayer los grandes donantes de Avilés recibieron agradecimientos por su generosidad. Como cada 14 de junio –Día Mundial del Donante de Sangre– se conciencia de la necesidad de hacer donaciones regulares para garantizar la calidad, seguridad y disponibilidad de sangre y sus productos. Se conmemora en esta fecha a Karl Landsteiner, el médico austríaco que descubrió y tipificó los grupos sanguíneos ABO, que significó “un antes y un después en las transfusiones de sangre entre humanos, pero sobre todo significó una solución de vida”, en palabras de Manuel Faustino Valdés Cabo, presidente de la Federación Española de Donantes de Sangre.
Y esa magia científica solo es posible gracias al ejército de donantes fieles como los homenajeados ayer en Avilés y otros tantos que extendieron su brazo coincidiendo con el maratón de donaciones que se celebra esta semana en el Ayuntamiento de Avilés.
El maratón de donaciones asegura las reservas
La asociación de donantes de sangre de Avilés y Covera que preside Carlos Vigil está satisfecha: solo este lunes, primer día del maratón que se celebra hasta el viernes en el salón de recepciones del Ayuntamiento avilesino, se recaudaron 103 bolsas de sangre. Ayer a media mañana ya sumaban más de treinta. “Los resultados son excelentes.
Las reservas estaban temblando y de esta forma se asegura existencia”, decía Vigil. El porqué del aumento de gasto de sangre en las últimas semanas guarda relación, a su juicio, con la recuperación de la normalidad de la actividad sanitaria. “Se han vuelto a hacer intervenciones quirúrgicas y otras prácticas médicas que requieren el uso de sangre”, explica el presidente de los donantes.
El maratón estival es la primera vez que se realiza en Avilés: “Los resultados están siendo buenos teniendo en cuenta que casi estamos en verano”. Esta fecha quedará previsiblemente en el calendario junto al maratón navideño.
