La comarca de Avilés está sufriendo una oleada de estafas aprovechando la creación de Unicaja. Se trata del denominado “smishing” (suplantación de la identidad del banco) y la realizan a través de mensajes sms a los teléfonos móviles. Las cantidades denunciadas hasta ahora son cuantiosas, en algunos casos de hasta 10.000 euros, según ha alertado el Cuerpo Nacional de Policía.
Lo que hace distinta esta estafa es que el sms que reciben los clientes y trabajadores de Unicaja provenía del propio banco, por lo que no levantaba sospechas. En él se solicita la introducción de la clave secreta de las tarjetas para efectuar y confirmar la adaptación a la nueva entidad y las modificaciones tecnológicas. Pero nada más que se introducir el código, automáticamente se descontaban de la cuenta miles de euros. Según la Policía, el fraude oscila entre los 2.500 y los 10.000 euros.
Fuentes policiales insistieron ayer, como ya se ha hecho desde la propia Unicaja, en que “ninguna entidad financiera se comunica con sus clientes por sms ni Whatsapp, así que es fundamental que nadie conteste a esos mensajes, y mucho menos que se faciliten los códigos de seguridad, pin, o datos de cualquier otro tipo”.
El fraude ya se ha detectado en varias partes de España, donde tienen clientes tanto Liberbank como Unicaja Banco, las dos entidades fusionadas en Unicaja. Las víctimas se cuentan al menos por decenas. La entidad financiera ha recomendado a todos sus clientes que ignoren el mensaje y lo eliminen, y sobre todo que no pinchen en el enlace que les incluye.
