La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Avanza el proceso de descontaminación de los tanques y depósitos de las Baterías de Avilés

Sepides incluirá el suministro de energía verde a la parcela en un contrato para todos los proyectos del grupo, tras dos licitaciones desiertas

Instalaciones de baterías de coque. | R. Solís

Avanza a buen ritmo la primera fase del desmantelamiento de las baterías de coque de Avilés, que consiste en la descontaminación y demolición de tanques y depósitos y que ejecuta la UTE Erri Berri-Afesa. Estos trabajos dieron comienzo el pasado 16 de junio y tienen una duración máxima de seis meses, por lo que tienen que estar rematados en la recta final del año, a mediados de diciembre.

Será ya en 2023 cuando se proceda a la demolición de las estructuras de hormigón, la etapa del desmantelamiento que eliminará la coquería del "skyline" avilesino. Cuando se concluya (el plazo total del contrato es de 18 meses) solo quedará en pie un gasómetro.

Las que están ahora en marcha son unas actuaciones prioritarias para evitar impactos negativos sobre el medio ambiente y consisten en la limpieza, descontaminación y achatarramiento del parque de tanques de benzol, el parque de tanques de alquitrán, la carga de camiones y el depósito de purgas, el parque de tanques de sulfúrico y sosa, los slops de depósitos de aceite y la fábrica de benzol.

Desde Sepides aseguran que esta primera fase (una vez superada la cero, que consistió en la retirada de los materiales sueltos de la coquería) "va viento en popa" y no han influido en su ejecución los trabajos que la empresa asturiana Aplicaciones Geomáticas ha realizado sobre el terreno para cumplir con el encargo realizado por el Ayuntamiento de Avilés a principios de junio, en vísperas del comienzo de esa fase uno: una réplica digital de las Baterías a la que se busca dar un uso museístico.

Avanza la demolición de las Baterías pero sigue sin resolver el contrato para suministrar energía verde provisional a la parcela.

Tanto para el mantenimiento en parada segura como para la ejecución de las obras es necesario contar con un suministro de energía eléctrica hasta que concluyan las obras de urbanización. Y Sepides se comprometió a que ese suministro provenga de energías renovables dado su compromiso de respeto y cuidado al medio ambiente para el nuevo "polígono verde".

El año pasado se adjudicó el contrato a Aura Energía por un plazo de tres años en 580.000 euros, pero tras la escalada de los precios de la energía supuso el primer golpe. La compañía comunicó el pasado noviembre la suspensión del contrato y el traspaso de los puntos de suministro a una comercializadora de referencia.

El Parque Empresarial licitó en enero un nuevo contrato de 335.219 euros para un periodo de un año (un plazo de ejecución más corto ante la fluctuación de precios y la incertidumbre en los plazos de inicio de las obras), pero quedó desierta.

El pasado julio se abrió una nueva licitación (por 133.108 euros), pero el resultado fue el mismo. La convocatoria quedó de nuevo desierta. Desde el Grupo Sepides se está trabajando en la contratación del suministro eléctrico para todos sus inmuebles para 2023 y este suministro de las antiguas baterías de Avilés se incluirá en ese contrato global.

"Prevemos que así no quedará desierta y tendremos adjudicada la energía verde de la parcela de Baterías en los próximos meses", sostienen en SEPI Desarrollo Industrial.

De forma paralela, continúa la tramitación para urbanizar los terrenos que se liberarán con el desmantelamiento de la coquería. Está previsto que la propuesta de reforma del plan urbano en la que vienen trabajando Sepides y el Ayuntamiento se eleve al Pleno ordinario de agosto, que se celebrará el próximo día 19, para su aprobación inicial.

Compartir el artículo

stats