Los abuelos que cuidan ocasionalmente a los nietos pidieron la tarde libre y los que ayer libraban de ese cometido despejaron su agenda para no faltar a la fiesta que todos los veranos –menos los que estuvieron marcados por las restricciones de la pandemia de covid– congrega en buena armonía a los miembros de la asociación de jubilados "La Peñona" de Salinas, una de las más numerosas y activas de la comarca. Más de 120 personas, según el cálculo del presidente del colectivo, Rafael Luis García, se apuntaron a la merienda-cena de hermandad, celebrada en la explanada aneja a la biblioteca de la localidad, muy cerca de la sede de "La Peñona".
Encabezada por la alcaldesa de Castrillón, Yasmina Triguero, una delegación de concejales de todos los partidos se sumó al ágape, dando pie a los jubilados a comentar sus puntos de vista sobre las necesidades del concejo y otra cuestiones de la vida cotidiana. También acudieron representantes de otras asociaciones de jubilados de Castrillón y el comandante al mando del puesto de la Guardia Civil de Salinas.
La directiva de "La Peñona" quiso homenajear este año a dos socios que rozan los 90 años, pero no por su edad sino por el hecho de que son "ejemplares" por la constancia y la frecuencia con que participan en las actividades de la asociación. Es por eso que la ovación del día se le llevaron Celestina Arniella Fernández y Jesús Tapiador Muñoz, a los que es fácil encontrar en el bingo social y en la partida de brisca de seis, respectivamente.