La crisis energética está impactando de lleno en las arcas de las administraciones locales, que han visto multiplicadas sus facturas de luz y gas desde el estallido de la guerra en Ucrania. En el caso del Ayuntamiento de Avilés, el recibo del gas se ha disparado más del doble, según se desprende de los últimos concursos para contratar el suministro: el precio ha pasado de 950.000 euros a dos millones en un bienio.
El Consistorio sacó a licitación en 2021 el contrato del gas municipal por 950.644 euros para un periodo de dos años (quedó desierto) y acaba de lanzar la convocatoria para el periodo 2022-2024 en dos millones (impuestos incluidos). Entre ambas convocatorias se ha producido un cambio en el tipo de pliegos y en las tarifas y este nuevo contrato recoge esas modificaciones. Ahora se referencia al mercado una parte del precio, explican fuentes municipales.
De este contrato depende el suministro de gas de diversas instalaciones del Ayuntamiento de Avilés, la Fundación Deportiva Municipal (FDM) y la Fundación Municipal de Cultura (FMC), hasta un total de 55 suministros.
Los mayores consumos se corresponden con los centros educativos y las instalaciones deportivas, según se desprende del presupuesto base de licitación y las aplicaciones presupuestarias recogidas en el pliego: 910.356 euros corresponden a Educación, 766.809 al suministro en las instalaciones deportivas, 232.176 a edificios municipales, 51.000 al Edificio Fuero, 46,112 a la Casa de Cultura, 31.756 a la Factoría Cultural y 20.811 al Conservatorio "Julián Orbón".
El contrato en cuestión recoge 255.251 euros para posibles modificaciones (el 15% del precio inicial) ante posibles variaciones en los importes de los precios de suministro, en los consumos estimados y por nuevos suministros a causa de altas de instalaciones o equipamientos no existentes.
La Corporación aprobó en el pleno ordinario del pasado junio varias modificaciones presupuestarias mediante créditos extraordinarios y suplementos de crédito por valor de 1,9 millones y el 87% de este dinero (1,7 millones) se destinó a cubrir el aumento de la factura de la luz y el gas con cargo a la hucha municipal (el remanente).
