El director de la fábrica de Fertiberia en Trasona (Corvera), Jesús Alberto González, ponente ayer en la feria Norte Renovables, estableció un curioso símil entre el hidrógeno y la Virgen de Covadonga que si bien no tiene ningún fundamento teológico, al menos puede servir para entender algunas de las características y la importancia de un gas llamado revolucionar la industria y el sector de la energía.
"Como la Santina, el hidrógeno ye ‘piquiñín’ y ‘galán’. Ye tan ‘piquiñín’ que es la molécula química más simple que conocemos. Y ye ‘galán’ porque ‘vive’ muy cómodamente, ocupando más espacio que nadie (en referencia a su escasa densidad y el mucho volumen que ocupa en comparación con otros gases)", contó González. La "lección de química" no acabó ahí: "El hidrógeno es altamente energético; y por seguir con el símil, también debía dar mucha energía el agua de Covadonga, porque todos sabemos lo que hicieron en el siglo VIII quienes por entonces la bebían".