Las desgracias nunca vienen solas, reza un conocido proverbio que es perfectamente aplicable a lo sucedido estos últimos días en el entorno del cabo Peñas, donde se realizan las labores de búsqueda de una joven gijonesa desaparecida desde el miércoles. Al margen de la investigación para hallar el paradero de la mujer de 32 años, que sigue sin dar frutos, un hombre se precipitó a la mar pasadas las 18.00 horas, una vez que se levantó el cordón policial que impedía el acceso a vehículos y viandantes ajenos a la investigación. El hombre llegó a las inmediaciones del cabo y, por causas que se desconocen, cayó por un acantilado próximo al negocio hostelero de Peñas y pese a los intentos para su rescate, fue imposible acceder a él dada la cercanía con los pedreros. El Helimer de Salvamento Marítimo se empleó a fondo para intentar recuperar el cuerpo, sin embargo, las rompientes de mar impidieron cualquier acción al borde del acantilado.
Los rescatadores tenían localizado al hombre en todo momento pero nada pudieron hacer por salvar su vida tras precipitarse peñas abajo y alcanzar el agitado mar en una zona en la que abundan las corrientes.
Según apuntaron los vecinos, se trataba de un "hombre mayor" del que no pudieron aportar más datos. También expresaron que hubo personas que intentaron frenar al hombre sin poder conseguirlo.
Las labores de búsqueda de la joven gijonesa iniciadas ayer siguen sin avances. La operación dirigida por la Policía Nacional de Gijón y que cuenta con la colaboración de la Guardia Civil y el servicio de Emergencias, entre otros, peinó el entorno del cabo Peñas desde las 9.00 horas. La unidad canina del Principado de Asturias hizo labores por tierra y una vez finalizada su labor, uno de sus miembros destacó que durante la búsqueda "no hallaron restos de ropa ni nada". El helicóptero de Emergencias pasó buena parte de la mañana en el entorno del islote del Castro, el popularmente conocido como La Tortuga por su forma. Peinó la zona una y otra vez, sin suerte.
Todo sigue como anteayer, con los familiares y allegados de la fallecida colaborando en la investigación desde el primer minuto y con la esperanza de hallar cuanto antes a la gijonesa de 32 años que dejó de pista su coche, de color rojo, aparcado en el aparcamiento más próximo al bar. La joven desaparecida es psicóloga de profesión.
El pasado miércoles, la Policía Nacional de Gijón entró en el domicilio de la joven, en el barrio de Montevil, después de que su entorno más cercano no recibiera noticia alguna de su paradero y una vez puesta la denuncia de su desaparición. Tras comprobar que en su casa no había pista alguna, ni teléfono móvil, ni carta de despedida y averiguar que su coche tampoco estaba en su garaje, ampliaron el radio de búsqueda y localizaron su vehículo en el entorno del cabo gozoniego.
Ahora, todas las labores se centran en el punto más al norte de Asturias, donde a la joven le gustaba ir a caminar. Las labores de búsqueda se retoman hoy, y de paso los servicios de emergencias intentarán rescatar el cuerpo del hombre precipitado al mar la tarde de ayer.
