Entrevista | Santiago Rodríguez Vega Presidente de la Autoridad Portuaria de Avilés

"El proyecto HyDeal puede suponer un cambio fundamental en los tráficos del Puerto de Avilés"

"Con el ‘GPO Grace’ las empresas tuvieron a personas desplazadas en Avilés y eso genera movimiento a nivel de ciudad. Nos tomamos con mucho interés que entrara ese barco y vendrán aún diez más"

Santiago Rodríguez Vega, en la zona del Estrellín, con el muelle de Valliniello, a su espalda. | María Fuentes

Santiago Rodríguez Vega, en la zona del Estrellín, con el muelle de Valliniello, a su espalda. | María Fuentes / C. Jiménez

Covadonga Jiménez

Covadonga Jiménez

La presencia en los muelles de Valliniello del buque "GPO Grace", récord de manga y toneladas de registro bruto, ha permitido elevar el techo del Puerto de Avilés y amplía su potencial de cara a futuros clientes. El presidente de la Autoridad Portuaria analiza a partir de ese hito los retos próximos de los muelles avilesinos, sus fortalezas y también sus debilidades.

–La llegada del "GPO Grace" para cargar piezas de transición para torres eólicas ha supuesto un salto significativo para las instalaciones portuarias. ¿Es ya la seña de identidad de los muelles avilesinos ese tipo de mercancías?

–Hay coincidencia en que la industria eólica va a tener un período de crecimiento muy importante en los próximos veinte años. Se están haciendo anuncios, por ejemplo, de proyectos para Gijón, el de Zima y Duro Felguera; en Coruña también que, como Gijón, tienen zonas de ampliación del puerto muy recientes sin utilizar y la eólica marina es una oportunidad para quien necesita estar a pie de puerto. En Avilés estamos muy bien posicionados pero a los desarrollos de Gijón o Coruña no vamos a llegar ni podemos quitársela.

–¿Puede llegar a ser perjudicial en algún momento que ese sea el grueso de los tráficos de Avilés?

–Nosotros vamos a captar los tráficos que nos permita nuestra capacidad física, que algo vamos a poder crecer, pero tenemos una capacidad bastante limitada. De las líneas nuevas de negocio que se están planteando la única que apunta maneras es esta, que tiene una ventaja pero también tiene un inconveniente, y a mí me preocupa, que es tener toda la margen derecha vinculada a la misma actividad e, incluso, con la misma empresa, pero lo que no puedes es negarlo. Si Windar está en plan de expansión, cree que tiene negocio para próximos años y ha apostado por Avilés y cree que Avilés puede satisfacerle con más espacio portuario y más instalaciones en el Puerto, si estamos en condiciones de hacerlo, tenemos que atenderlo. Otra cosa es que tuviéramos dos opciones sobre la mesa y tuviéramos que pensar; desgraciadamente no es el caso.

–Y mientras tanto, los muelles y las instalaciones de Alcoa esperan inquilino. ¿Para cuándo cree que podrá verse algún avance en el proceso de Alu Ibérica en el que la Autoridad Portuaria también está personada como titular de una parte del suelo para explotar en concesión?

–Lo importante es saber qué inversores están dispuestos a entrar ahí y, sobre todo, para tener respuesta a ello, conocer qué está pidiendo el administrador concursal.

–¿Duda de que alguno de los interesados se haya echado atrás?

–Mi percepción es que ahora mismo, salvo Windar, no hay nadie interesado en una propuesta global. Siguen apareciendo y preguntando industriales interesados en la parte de la fabricación de aluminio reciclado, pero un proyecto industrial de más envergadura, que abarque todo el conjunto, no.

–Si Windar no optara finalmente…

–Podría suponer un problema. Nosotros estamos trabajando para generar las condiciones de una concesión. Estamos ajustando superficies, valores… pero la parte privativa, que no es de dominio público portuario, ¿cómo la resolvemos? Lo máximo a lo que se ha llegado hasta ahora es una fórmula en la que si hay varias ofertas económicas, y la oferta económica mejor no es compatible con el mayor interés portuario, queda condicionada su viabilidad al interés portuario. Pero no está por escrito y no se ha dado solución a ello.

–¿Se puede buscar el modelo de La Coruña?

–En La Coruña todo era privativo, no hay concesión portuaria. Cuando aquí aparecimos nosotros en escena se montó bastante barullo, sin que fuera nuestra intención, pero rompió el esquema donde estaban involucrados el administrador concursal, el Ministerio y el Principado para establecer un procedimiento. Esa parte se tardó en entender, el problema es que haciendo lo que tenía que hacer, y ahí ya me involucro, no tenemos una solución fácil.

–¿Confía todavía que habrá para el suelo de Alcoa proyectos industriales generadores de más empleo del que había con Alcoa?

–Si hay alguna estrategia que cuenten con que el máximo aliado que pueden tener es el Puerto. El procedimiento concursal está muy bien para dar tutela jurídica a los acreedores y mantener la viabilidad de una empresa, pero en una situación como esta donde la empresa ya está liquidada, el procedimiento concursal es una locura. A lo mejor la opción es que el puerto compre, pero es complicado patrimonialmente, debe estar el Ministerio convencido y la comunidad autónoma.

–¿Puede convertirse esta en otra oportunidad perdida para Avilés?

–Las cosas hay que relativizarlas. El desgarro mayor es que fue una plantilla muy joven que quedaba en el paro. La parte social quedará resuelta pero la mayor limitación es la situación administrativa, jurídica y patrimonial tan complicada. Todo dependerá de las ofertas industriales sobre la mesa y el único que puede tener interés en ello, por estar asentado en el territorio, es Windar.

–La ordenación del muelle que explota ArcelorMittal en la margen derecha también les permitirá disponer de más de espacio logístico en la margen derecha. ¿Cómo avanzan esos planes?

–Con Arcelor vamos a llegar a un acuerdo. Les daremos una prórroga en la concesión por el tiempo máximo, que son 8 años. También nos interesa completar todo el desarrollo de la cantera, que nos va a llevar tres años. Eso está más enfocado y junto con la resolución del tema de Alcoa es lo que va a contribuir a generar dinámicas nuevas en el Puerto.

–¿Le obsesiona mejorar las cifras de tráficos de cara al próximo ejercicio?

–No, de hecho tenemos que cambiar incluso el objetivo de las toneladas. En movimiento de graneles es difícil que con la estructura actual podamos crecer. Lo que pueda pasar en el futuro es que, si toda la revolución en torno a las nuevas energías va hacia adelante, es evidente que se van a producir nuevos elementos de oportunidad. Y, por ejemplo, el proyecto HyDeal, de cara a empresas como Fertiberia, si se desarrolla, puede suponer para el Puerto un cambio fundamental en sus tráficos. Es un proyecto muy sólido que se transmite desde el punto de vista técnico y Fertiberia puede convertir al puerto de Avilés en un centro de exportación de amoniaco, eso puede ser un cambio espectacular. Arcelor, en la medida que reduce producción, tampoco va a aumentar sus movimientos, pero en todo lo que se refiere a graneles líquidos son movimientos de mucho interés para el puerto porque son de alta rentabilidad y de poco coste portuario.

–¿Es satisfactorio para el puerto el protocolo firmado para la cantera de El Estrellín, una operación de la que podrán disponer de 80.000 metros cuadrados más de suelo portuario sin expropiaciones?

–Nos cumple las expectativas pero tardaremos cuatro años o cinco en tener ese suelo disponible. Es bastante pero no es fácil hacerlo primero. La realidad es que sabemos que tenemos una posibilidad ahí y nos marca un ritmo de crecimiento.

–¿Qué se verá del plan de expansión del puerto en este 2023?

–En lo que se refiere a toda la margen derecha estamos trabajando en unir el muelle de Valliniello con el de Arcelor porque sabemos que a diez y ocho años vista va a tener una ocupación completamente distinta y vamos a necesitar tener una terminal, tal vez, para carga de graneles líquidos, y tienes que prepararte para ello. No puedes lanzar todavía la inversión, primero es unir los muelles, rellenar ese espacio, porque no tenemos problema de muelle sino de superficie logística. Y con lo de Alcoa, sea cual sea la solución, que alguna va a haber, en el muelle de Alcoa vamos a necesitar invertir, o nosotros o un concesionario, porque tiene poco calado y habrá que prepararlo para potenciar toda la industria que se pueda instalar en los terrenos de Alcoa y en lo que se incorpora ahora de Acciona.

–En la margen izquierda, ¿dan por perdida la obra de mejora de calados en el muelle de Raíces?

–Estamos mirando, el problema es que son inversiones muy elevadas, pero ese muelle podría aprovecharse más si tuviéramos algo más de calado. Y luego tenemos algunos usos portuarios que tenemos que definir en los próximos años.

–La fábrica china de BYD ha mostrado interés por ubicarse en terrenos de la Zalia o el puerto de Gijón. ¿Podría optar al puerto de Avilés a un proyecto de similares características?

–Va a ver muchos anuncios de esos en los próximos meses. Ahí tenemos una opción junto con más países y en España también junto a Vigo, pero eso nos tiene que transmitir optimismo frente a todos los años que llevamos escuchando desde algunos sectores una crítica muy dura con respecto a Zalia. Para quienes defendimos siempre su papel para desarrollar una actividad en el futuro, con el factor de atracción de su proximidad a los puertos, lo que ahora se evidencia es que el papel de lo público consiste en favorecer con dinero público proyectos que desde la iniciativa privada a lo mejor no salen y estamos en una situación en que parece que aquello que no es rentable para el sector privado no lo puede hacer nadie cuando el papel de lo público es impulsar eso. Si se consolida, las ganancias van a suplir, con mucho, el coste que ha tenido. Si en la actividad pública no hacer esas apuestas, no arriesgas nada.

–¿La única solución para los dragados es la depuración y descontaminación de áridos como han planteado al Ministerio?

–El de los dragados es un tema sin resolver y una amenaza importante para nosotros. Mantenemos líneas de actuación que sean prácticas y aporten algo y lo que tratamos de decir al Ministerio es que no tiene sentido lo que nos plantean y que no es un problema de que devolvamos playa al sistema. Es que fuimos a buscar arena y no nos dejaron utilizarla, por tanto, busquemos otra cosa. A ver si logramos hacer entender que lo que imponen en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) es una estupidez.

–¿Por qué no cuaja el turismo de cruceros en Avilés? Este año no habrá ninguna escala.

–Porque todavía no entraron en recuperación. El año de la pandemia teníamos cinco o seis. Me dicen que incluso está volviéndose a cruceros pequeños, que el de los grandes no está arrancando y no fue un mercado que buscamos como negocio, es más como imagen. Hemos tenido algunos atracados en mantenimiento y como puerto protegido y lo hicimos por política comercial, para que nos conozcan, pero estamos esperando a ver por dónde salta el mercado para ofrecerles lo que podemos, no grandes cruceros.

–¿Cómo es la relación del puerto con la ciudad?

–Convive perfectamente y, afortunadamente, no hay conflictos. Hay una buena relación entre los objetivos del puerto y de la ciudad y tenemos que intensificar la relación en el futuro en calidad de servicios, temas ambientales, innovación tecnológica, vinculación con desarrollos urbanos, tener más presencia del puerto en ámbitos ciudadanos... teniendo en cuenta que nuestra ciudad no es solo Avilés, sino también Castrillón y Gozón.

–¿Cómo convive la actividad portuaria más industrial con la pesquera?

–La principal potencia del puerto de Avilés es en la comercialización de pesca y nuestra actividad es ser el centro comercializador de pesca más importante de Asturias. La rula funciona bien y tiene un gran equipo. Y pese a ser una lonja participada por organismos públicos muy potentes no estamos en el marco de acceso a subvenciones comunitarias que sí tienen las pequeñas.

–¿En qué lugar se posiciona usted en la lucha de los pescadores contra los eólicos?

–Me imagino que esos proyectos están hechos con el nivel de rigor y conocimiento técnico necesarios pero no me posiciono en contra de la instalación de eólica marina, no creo que tenga tanto perjuicio.

–Respecto al futuro parque empresarial de Baterías, ¿mantienen la postura de no comprar suelo?

–Lo hemos discutido y, al final, no lo hemos planteado porque a la hora de posicionar ese suelo en el mercado para nuevas industrias, que no se pierda la perspectiva de que una de sus ventajas es la proximidad al puerto y que, seguramente, es de los últimos suelos en la comarca que tienen esa ventaja. Pero si el hecho de que el puerto sea propietario facilita la instalación de alguna actividad, bien a través de una concesión, estaríamos dispuestos.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents