El Socorro de Luanco también es cosa de chicas

La de ayer fue una mañana histórica para Luanco. Claudia Carnero, Covadonga Diego y Celia y Olaya Giadas hicieron historia en las fiestas del Socorro, y es que las cuatro se convirtieron en las primeras portadoras femeninas del Cristo desde 1776, año en que sucedió el milagro por el que, según se cuenta, el Cristo del Socorro salvó a decenas de marineros luanquinos de morir ahogados en el Cantábrico un 5 de febrero de aquel año.

Todo comenzó a las 11.30 en una plaza de la Villa abarrotada. En el centro, la Banda Danzas de Luanco y la Banda de la Unión del Principado afinaban instrumentos. Bajo un cielo encapotado que amenazó con lluvia, la comitiva inició el paso parara conmemorar el milagro de hace ya 248 años.

La procesión echó a andar con la melodía de las gaitas en dirección hacia la iglesia de Santa María. A su paso, las personas abrían el camino. Lucía Fernández, Elena Álvarez y Marta Muñiz fueron parte de los muchos asistentes que hicieron el pasillo frente a la plaza de la Villa. Por las calles, hosteleros, comerciantes y clientes no dudaron en dedicar unos minutos para asomarse para seguir en primera fila el paso de músicos y autoridades. Ya en la calle La Riba, la procesión perdió la cabecera del paso. Metros por delante, decenas de feligreses comenzaban a llegar a la iglesia, donde finalizaría la ruta cívica musical. Desde el cruce con la calle El Muelle se podía admirar la parroquia engalanada con los mantos típicos de las fiestas del Socorro.

En la parroquia, con el repique de las campanas que indicaban las doce del mediodía, del interior De la Iglesia comenzaron a salir la Virgen del Rosario primero, y tras ella, el Cristo del Socorro. En ese momento se produjo el hito que protagonizaron las cuatro gozoniegas: Claudia Carnero, Olaya y Celia Giadas y Covadonga Diego sosteniendo al Cristo sobre sus hombros durante la procesión.

En el exterior, las decenas de asistentes se convirtieron en cientos. Desde las alturas también se incrementó el número de espectadores. Los voladores comenzaron a retumbar y el paso comenzó a discurrir por las calles de Luanco, con destino de nuevo en la iglesia previa parada en la playa, donde el párroco José Antonio Alonso Artero, bendijo las aguas y recordó a los marineros fallecidos en la mar, además de pedir por el regreso de los que actualmente faenan y agradecer por los alimentos que llegan desde las embarcaciones. Una vez de regreso, dio comienzo la misa, que también se emitió por internet para los feligreses que no podían estar presentes.

Hoy, las gentes de Luanco pondrán fin a las fiestas del Socorro con una calderada en los restaurantes de Gozón. Además, a las 12.00 horas se celebrará una misa en la iglesia de Santa María para recordar a todos los fallecidos en la mar.

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