- Multimedia
- Clasificados
- Servicios

Ver más galerías relacionadas
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
David Cabo
Cientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.
Noticia guardada en tu perfil
Ver noticias guardadasCientos de personas acompañaron ayer a San Telmo en su procesión por las calles de La Arena tras un fin de semana lleno de actividades en el pueblo sotobarquense. La misa solemne y posterior procesión marinera fue el cénit de unos días en los que los vecinos se rindieron a uno de sus santos de culto, que, como es habitual, no recorrió solo las calles de la villa marinera: la Virgen del Carmen y la de Covadonga le acompañaron en todo momento, además de una larguísima red de pesca y varios aparejos.