De comentar a Lamine Yamal y a Vinicius a ser profesor en un conocido colegio de Avilés: la historia detrás de Alfonso Ramos

Alfonso Ramos, maestro en el Santo Ángel de Avilés, compagina su vocación con el análisis de partidas profesionales de EA FC y encuentros de fútbol: "Los niños me dan menos dolores de cabeza", bromea el profesor, natural de Sama de Langreo

Alfonso Ramos, de blanco, con algunos de los niños de su clase. | MARA VILLAMUZA

Alfonso Ramos, de blanco, con algunos de los niños de su clase. | MARA VILLAMUZA

Noé Menéndez

Noé Menéndez

Avilés

Por el día, profesor en los salesianos. Por la noche , comentarista de EA FC (lo que antes era el FIFA) y de los encuentros de Real Madrid, Atlético y Barcelona. Esa es la doble faceta que compagina Alfonso Ramos. Nacido en Sama de Langreo, el asturiano hizo carrera dentro de los deportes electrónicos, consiguiendo el Mundial hasta en dos ocasiones, aunque ahora ha colgado el mando para apostar por su vocación: la educación. Eso sí, no ha dejado su pasión de lado, porque trabaja en las retrasmisiones de la competición oficial de EA FC, donde participan la mayoría de equipos de Primera y Segunda División. Eso le ha abierto las puertas, además, para participar en los encuentros de los tres grandes del fútbol español. "Compaginar todo es difícil, pero tengo claro que lo que más me llena es la educación. Es vocacional", señala langreano, que en las últimas semanas ha impartido magisterio en Avilés, en el Santo Ángel.

Vayamos al principio. Ramos empezó en el mundo de los videojuegos de joven, como cualquier chaval. La diferencia es que él tenía un don para "la maquinita". "Fui jugador de FIFA muchos años. Fui el primero en conseguir dos campeonatos del mundo", recuerda el langreano. Cuando decidió colgar el mando dio el paso a los banquillos. Fue entrenador e incluso llegó a ser seleccionador español de la especialidad. "Fue una época muy guapa. Me acuerdo una vez que viajamos con la selección de fútbol. Ellos jugaban ante Noruega y Suecia, y nosotros contra la contraparte de los videojuegos. Estuvo muy bien porque nosotros acabábamos antes, por lo que podíamos ver los partidos ‘de verdad’", apunta .

De ahí dio el paso a ser comentarista de la liga profesional, donde compiten equipos como el Sporting o el Oviedo. "Desde hace cuatro años voy a las oficinas de Mediapro a trabajar. Les convencí por el conocimiento que tengo del juego, al final son muchos años. Ahora no juego tanto, pero tengo como un don para el EA FC", explica. Además, esto le ha abierto las puertas para participar en las retransmisiones multicámara de los encuentros de Real Madrid, Barcelona y Atlético. "Es algo que hago desde mi casa. Les dije que me apetecía probar y, por ahora, les estoy gustando. No me supone un gran esfuerzo extra, porque esos partidos los vería por pasión. Lo que me lleva trabajo es prepararlos bien, porque tenemos mil informes de estadísticas, pero es algo que me encanta", señala

Eso lo compagina con su otra faceta, la de ser profesor en el colegio salesiano Santo Ángel de Avilés. "Lo de ser maestro es algo que llevo en la sangre. Mi madre fue profesora y trabajó en el Gervasio Ramos, un familiar de antaño que era inspector de Educación. Es mi vocación", asegura Ramos, que indica que "he tenido ofertas en las que podría haber cobrado mucho para ser entrenador de EA FC, pero quiero trabajar de esto, que es lo que más me gusta". "Estoy muy feliz en la educación, me da menos dolores de cabeza", bromea el langreano, que aprovecha sus experiencias para encandilar a su joven alumnado. "Hay alguno que no lo sabe, pero los más futboleros sí que me tienen controlado, sobre todo porque los padres te buscan. Les enseño fotos con Messi o Cristiano, de cuando he coincidido con ellos, y les encanta", señala el asturiano.

Ahora le toca despedirse de las aulas avilesinas, donde ya había estado cubriendo otra baja, aunque confía en volver. "Aquí estoy muy contento, me tratan genial", confiesa. Mientras, seguirá narrando las hazañas de Lamine Yamal, de Vinicius y de los mejores jugadores de EA FC.

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