Illas mima su escuela rural

Illas se rearma para defender las escuelas rurales. El concejo tiene una de las aulas del Colegio Rural Agrupado, en Callezuela, y ayer fue el escenario ideal para grabar un podcast que busca poner en valor este tipo de educación. "Después de estudiar en una escuela así llegué al instituto súper preparada", destacó Noemi López, ahora responsable de calidad en quesos La Peral y antigua alumna de una escuela rural, que participó en la tertulia junto a Mónica Menéndez, presidenta de la asociación de vecinos de Pillarno; Borja Riesgo, profesor en Naveces; y Javier Fernández, periodista e impulsor del proyecto.

"La cercanía que tienen esas escuelas marca la diferencia. Tengo el recuerdo que mis profesoras hasta me dejaban peinarlas", apuntó López, que estudio en la escuela de La Peral y que recuerda que "mi profesora de aquella época era como mi segunda madre". Luego tuvo que dar el salto al instituto de La Magdalena, en Avilés, donde, a pesar de lo que mucha gente piensa, "llegué súper preparada, aunque el cambio fue gigante".

Por su parte, Riesgo es profesor en el colegio de Naveces y comentó que, cuando era niño, e iba a una escuela similar, "había días, cuando llovía, que mi maestro me llevaba en su coche a clase". "Estos colegios permiten conocer a todos los compañeros, de todas las edades. Ir a un colegio así marca mucho. Además, la calidad de la educación mejora. No es lo mismo atender a tiene alumnos que ha 25", subrayó.

"Toda mi familia fue a una escuela rural, a la de Pillarno. Eso crea comunidad, es una seña de identidad y algo que te une al lugar al que perteneces", indicó Menéndez, que, para aquellos que piensen que las clases en los CRA tienen menos nivel, recordó que "la programación es la misma para todos". "Las escuelas rurales tienen cosas, como la cercanía o el número de alumnado, que consiguen marcar la diferencia", sentenció el joven en el encuentro que se celebró Callezuela ante una veintena de personas.

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