Semana laboral de cuatro días

Una reducción significativa de los niveles de estrés y las bajas por enfermedad: el 71% de los empleados afirman tener menos agotamiento y el 39% estar menos estresados que al inicio del ensayo; son resultados que revelan el Informe de febrero de 2023 de la Universidad de Cambridge, la mayor prueba científica mundial de una semana laboral de cuatro días: 61 empresas del Reino Unido se comprometieron a una reducción del 20% de las horas de trabajo para todo el personal, unas 2.900 personas, sin disminución de los salarios, durante un periodo de seis meses a partir de junio de 2022. La gran mayoría de las compañías también mantuvieron los objetivos de productividad a tiempo completo. 56 han anunciado que seguirán con esta modalidad y 18 la mantendrán de manera indefinida.

El Gobierno español ha anunciado una convocatoria análoga con ayudas de hasta 150.000 euros para las empresas que implementen esta nueva forma de organizar sus jornadas laborales aplicando reducciones del tiempo de trabajo manteniendo los salarios y mejorando sus resultados empresariales.

Las compañías participantes registraron un incremento medio del 1,4% en sus ingresos respecto al mismo periodo del año anterior. La mayoría de los empleados estaban muy interesados en mejorar ellos mismos su eficiencia. Las reuniones largas con demasiada gente se acortaban o se abandonaban por completo. Los trabajadores estaban mucho menos dispuestos a perder el tiempo y buscaban activamente tecnologías que mejoraran su productividad.

Interanualmente, se redujeron en un 65% las bajas por enfermedad y en un 57% el número de empleados que abandonaban la empresa. Los niveles de ansiedad y fatiga declarados disminuyeron en todos los sectores, mientras que la salud mental y física mejoró, asimismo les resultaba más fácil conciliar con un día extra de tiempo libre: el 60% considera que es más fácil compaginar el trabajo con las responsabilidades familiares, y el 62% afirma que es más fácil compaginar el trabajo con la vida social. Las empresas implementaron reuniones más cortas con órdenes del día más claros, periodos de concentración sin interrupciones, reformaron la etiqueta del correo electrónico para reducir las largas cadenas y la rotación de la bandeja de entrada, y mejoraron los procesos de producción, con listas de tareas para un traspaso eficaz.

Los empleados utilizaban el tiempo libre adicional en administración de la vida: tareas como hacer la compra o las tareas domésticas y un descanso adecuado para actividades de ocio los sábados y domingos; una reducción significativa del estrés con facilidad para la desconexión en casa, incluso con la desaparición de la angustia dominical y la deuterofobia. En cuanto a la cultura de trabajo, los empleados se mostraron en general positivos, sintiéndose más valorados por su empresa y describiendo un sentido de propósito compartido y por los esfuerzos para que la semana de cuatro días fuera un éxito.

Además subrayar también que tiene beneficios medioambientales –en el consumo energético de la propia empresa y al reducirse los desplazamientos–, mitigando el perjudicial cambio climático.

Entre las organizaciones había desde minoristas en línea y proveedores de servicios financieros hasta estudios de animación y una pescadería local, pasando por sectores como la consultoría, la vivienda, las TI, el cuidado de la piel, la selección de personal, la hostelería, el marketing y la sanidad.

Los antecedentes históricos también avalan esta medida, la semana laboral de cinco días se introdujo como norma en la mayoría de los países a lo largo del siglo XX; antaño era de seis días: largas jornadas laborales de más de doce y catorce horas, el trabajo infantil, la falta de descanso entre jornadas laborales…hasta que finalmente se acabó imponiendo la razón y la cultura del progreso y se implantó en la Ford, incrementando la productividad y mejorando el salario de los trabajadores que así podían adquirir un automóvil.

En definitiva, es una evidencia que el éxito futuro de las relaciones laborales pasa por un cambio en el modelo de trabajo: reducción de tiempo de trabajo, fórmulas flexibles, permisos (dependientes a cargo), bolsa de horas, excedencias estudio o viaje; en cómputo semanal y sin reducción salarial como en los países nórdicos todo en aras de incrementar la motivación, la satisfacción y, por ende, la productividad abordando de forma flexible el tiempo de trabajo en su conjunto

Suscríbete para seguir leyendo