Opinión
La Inmaculada y Carreño
La contribución de una monja soriana y de un pintor avilesino a la causa del dogma de la Purísima Concepción de María
Se puede decir que la vida pública y privada, literaria y mística de la gran soriana de Ágreda –donde se conserva su cuerpo incorrupto– sor María de Jesús, consejera política y espiritual del rey Felipe IV, se centró en la defensa apasionada de la Inmaculada Concepción de la Madre de Jesucristo. Siglos antes de las apariciones de Lourdes en las que Nuestra Señora le dijo a la niña Santa Bernardita que era la Inmaculada Concepción; también antes que el Papa Pío IX definiera solemnemente este dogma, Sor María de Jesús ya lo defendía y solicitaba tanto al Papa como al Rey de España que fuese reconocido. Como lo plasmó el gran pintor avilesino Juan Carreño Miranda en sus bellas "Inmaculadas".
Toda la existencia de esta soriana universal que no salió nunca de su convento de Ágreda estuvo consagrada a defender este privilegio mariano que la Iglesia celebró ayer, 8 de diciembre. Así, ruega con todo encarecimiento que ese sagrado privilegio fuese reconocido, incluso oponiéndose a insignes teólogos tomistas que no aceptaban en principio la concepción inmaculada libre de todo pecado actual y original. Incluso el mismo monarca Felipe IV, en una carta de las muchas que se escribían, le decía que existían pocas esperanzas de que Roma, el Papa, reconociese el singular privilegio de Nuestra Señora.
Pero ella estaba dispuesta a ofrecer su propia vida en su defensa. Para honrar este privilegio escribió su obra cumbre de la literatura, "Mística Ciudad de Dios". La festividad de la Inmaculada Concepción la celebraba de forma singular. El día 8 de diciembre de cada año era motivo de devoción y alegría, tal como aparece tratado en su obra máxima, una biografía espiritual de la Santísima Virgen. Así escribe: "El día octavo de diciembre (la misma Virgen María) celebraba su Inmaculada Concepción con singular júbilo y agradecimiento, porque este beneficio fue para la gran Reina de suma estimación. Comenzaba desde la tarde antes, ocupaba toda la noche en alabanzas al Señor. Considerábase formada del común barro y descendiente de Adán por el común orden de la naturaleza, pero elegida, entresacada y preservada solo ella entre todos de la común ley y exenta del pesado tributo de la culpa y concebida con plenitud de dones y gracias y libre de la terrible herencia del fomes peccati y sus penosas consecuencias de enfermedad, dolor y muerte".
Sor María de Jesús de Ágreda, por su gracia especial de la ubicación, evangelizó a los indios de Nueva España (México) que la reconocían como su dama azul, pues el azul es el color inmaculista y así pintó Carreño los mantos de sus "Inmaculadas".
Suscríbete para seguir leyendo
- El apelativo que se retirará (para siempre) de un emblemático rincón avilesino
- Malos tratos en Avilés: detienen a una mujer de 45 años por pegar en la cara y en el cuello a su pareja en plena calle
- Las claves del controvertido proyecto de los dueños de Ferrari en Gozón (y que el Ayuntamiento acabará bloqueando)
- Este es el plan de Castrillón para impulsar el gran parque logístico del Aeropuerto que creará 3.000 empleos
- Impulso definitivo para la 'joya natural' de Luanco (todos los detalles de la obra de la senda costera a Cabo Peñas)
- Una cantante de La Arena, último fichaje de Tu cara me suena
- Las claves de la reorganización interna del gobierno de Avilés, que empieza en Festejos
- La variante de Avilés, una 'trampa' poco iluminada y con pasos de fauna para 19.566 conductores