Opinión

Currus navalis

En Avilés se festeja el Carnaval no como se hace mayoritariamente en todos los sitios , es decir siguiendo el paradigma de la gran joya de la literatura española el libro del Bueno Amor, un manual del "Ars amandi" cristiano relatado por el clérigo vitalista y festivo, Juan Ruiz , más conocido como Arcipreste de Hita, quien nos relata en cuaderna vía, una de las expresiones más clásicas del arte literario español, una batalla grandiosa de proporciones gastronómicas y litúrgicas, porque no solo de carne vegana o verdadera vive el hombre. Don Carnal, representado por un obeso varón con su ejército de carnes, que lucha dos días contra una dama escuálida rodeada con sus pescados, en pleno Carnes- Tolendas. "El adiós a las carnes". En Avilés se plagia el modelo pagano romano del Currus Navilis, que los romanos hacían por su río Tíber. Este año marcado no por la covid- 19 sino el wokismo relato de todas las contradicciones y enfrentamientos sustentados en la transversal ideología de género que destruye cuanto toca.

La batalla que poetizan los versos clericales, los inicia Don Carnal arrogante y prepotente; sanguinario y vitalista que se impone sin contemplaciones a los ayunos y abstinencias de doña Cuaresma, que espera astuta imponer sus normas a partir del Miércoles de Ceniza: recuerda a todo fiel que se considera cristiano, que llegarán los tiempos de la conversión y la penitencia por el pecado, palabra maldita , pero muy común.

Con este bélico poema el genial clérigo de Hita nos deleite con un simbolismo en el que subyace la tendencia del ser humano hombre o mujer a rebelarse contra políticas que todo lo quiere controlar con imposiciones que violan los derechos fundamentales a la vida, a la libertad de expresión, a la propiedad y de comercio.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents