Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Opinión

José Sacristán cuenta todas las vidas

El actor llena de emoción el teatro Palacio Valdés con su estreno nacional de "El hijo de la cómica"

Fernando Fernán-Gómez, contando su vida, cuenta la vida de todos. Para eso sirve la literatura. "La literatura mantiene vivo el recuerdo de lo que la humanidad ha sido, de lo que podría ser, de lo que nunca debería llegar a ser", explicó un día, hace veinte años, Umberto Eco.

José Sacristán cuenta todas las vidas

José Sacristán cuenta todas las vidas

A esto se amarra José Sacristán, que este viernes estrenó en el teatro Palacio Valdés, en Avilés, "El hijo de la cómica",un drama que el propio Sacristán escribió basándose en las memorias de Fernán-Gómez, una especie de "La forja de un rebelde", de Arturo Barea, o de "La busca", de Pío Baroja.

Pero no sólo se encargó de la escritura del drama: fue su director y su único intérprete.

Lo hizo todo tan bien que los espectadores avilesinos se pusieron en pie y se rompieron las manos a aplaudir: aquella vida de cómico era vida de todos. De Sacristán, en primer lugar, pero también de cualquier nieta con abuela. O de cualquier hijo sin padre.

"El hijo de la cómica" es una historia triste y, a veces, también es feliz. "Hay que recordar, hay que recordar", dijo Carlos Galván al final de su vida de cómico, un cómico con las carnes y las voces de José Sacristán,una de las criaturas perdidas en el mundo de "El viaje a ninguna parte", la obra maestra de Fernán-Gómez, otra historia triste que a veces es feliz: los cómicos están para detener melancolías.

Sacristán, a partir del relato de Fernán-Gómez, es, él mismo, Fernán-Gómez y en esta transformación los espectadores sólo pueden emocionarse. El actor, cuando es dramaturgo, construye un drama perfecto. Y cuando es director, ese drama perfecto es una bomba atómica; cuando el actor es actor los corazones del personal dejan de palpitar. Y cuando llega el tango de Gardel, el público recupera el alma y así, como si nada, sale del teatro mejor que cuando había entrado.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents