Oviedo, Pablo ANTUÑA

Es no de los clubes más veteranos de Oviedo y con mayor tradición tanto en el equipo regional como en las categorías inferiores. Fundando en 191, el Pumarín luce con mucho orgullo en su página web el haber sido el primer equipo de un barrio de la capital asturiana en haber ascendido a Tercera División, categoría a la que ahora intenta volver desde Regional Preferente y seguir sumando años a sus 17 temporadas en la categoría. Pero ese no es su único bagaje. El Pumarín cuenta con un centenar de chavales que disfrutan cada día del fútbol en el Luis Oliver. Lo hacen repartidos en seis equipos. Sus máximos exponentes el Juvenil A y el Cadete que intentarán lograr el ascenso: "Son nuestra mayor baza, tenemos un buen bloque en estos equipos y aunque somos conscientes de nuestro potencial, creemos que la apuesta que estamos haciendo por estos dos equipos dará resultado", explica su presidente Ángel García.

El club ovetense cuenta con 200 socios y con un presupuesto anual de 40.000 euros. Comparten campo con el Grujoan tanto para entrenamientos como para partidos y sin renunciar a nada, Ángel García tiene claros los objetivos: "Aquí nuestro fin es formar a los chavales desde pequeños. Si uno de ellos por año llega al primer equipo, daremos nuestro objetivo por cumplido".

El club en las categorías más pequeñas se nutre de jugadores de la zona, mientras que ya en juveniles buscan la competitividad y apostar por un bloque fuerte.

Con objetivos muy parejos se enmarca el conjunto cadete del Pumarín. El club se ha reforzado con cuatro jugadores de la Peña Berto, pero con el mismo bloque de la temporada pasada, intentarán conseguir el ascenso a segunda: "Son casi todos de segundo año, un dato importante en esta categoría, porque un año de diferencia se nota mucho, mantuvimos a los chavales del año pasado que llevan casi toda la vida jugando aquí en el Pumarín. Este año tenemos muchas ilusiones depositadas en este equipo", resalta su entrenador, Marcos Álvarez

Pero para conseguirlo, tendrán que sufrir mucho. El grupo es casi íntegro de la zona de Oviedo y aunque es difícil pronosticar los favoritos, Marcos Álvarez opina sobre los más peligrosos: "El Juvencia y Los Arcos y algún tapado que no controlamos bien seguro que nos darán muchos problemas", concluye el técnico del equipo ovetense.