Las emisiones brutas de CO2 equivalente en España sumaron 313,5 millones de toneladas el año pasado, un 6,2 % menos que en 2018, según los datos del Avance del Inventario de Emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI) 2019, publicado por el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco).

Estos datos preliminares muestran una bajada de las emisiones de GEI en 2019, pese a que fue un año hidrológico seco, que la producción hidráulica se redujo el 27,6% y que la economía creció con una subida del PIB del 2%.

Para la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, los registros ponen de manifiesto "que el proceso de descarbonización en España ya ha comenzado", a la vez que ha destacado que la bajada de emisiones de GEI se produce "en un contexto de claro crecimiento económico" que demuestra que es posible "deslindar, y desacoplar crecimiento y emisiones de gases de efecto invernadero".

Ribera ha manifestado además que en 2019 se ha conseguido romper con la "dinámica" de que la baja hidraulicidad va ligada al aumento de los GEI y ha añadido que ahora toca afrontar el "desafío complicado" que representa reactivar la economía "desacoplando definitivamente las emisiones de nuestro bienestar".

De los datos del avance se desprende que, a nivel global, el nivel de emisiones de gases de efecto invernadero aumentó el año pasado un 8,3% respecto a 1990 y un 29,3% en relación con 2005.

Las emisiones procedentes de instalaciones sujetas al Sistema Europeo de Comercio de Derechos de Emisión disminuyeron un 14% en 2019 y los gases provenientes de los sectores difusos, no regulados por el citado sistema, descendieron un 1,6%, mientras que los generados por la aviación doméstica -que suponen el 1% del total- aumentaron un 7,4% respecto a 2018, según el informe.

Todos los sectores redujeron sus emisiones, salvo los residuos y el transporte que sigue siendo el que más contribuye, con un 29% del total (un 7% más que en 2019) debido sobe todo al transporte por carretera, que supone el 26,8% del total.

La generación de electricidad (que representa el 13,5% de las emisiones) bajó un 28,7% su nivel de CO2 equivalente el año pasado, gracias sobre todo a la caída de la producción por carbón (-64%) y al crecimiento de las energías alternativas y de las centrales de ciclo combinado, un 85,9% más que en 2018.

Respecto a la industria (20,6% de las emisiones totales) los gases de efecto invernadero disminuyeron un 2,9% en 2019 y en el sector comercial e institucional (el 9% del total del GEI) bajaron el 3%, debido al menor consumo de gasóleo C por altas temperaturas.

En agricultura y ganadería en su conjunto (12,5% del total) las emisiones de GEI se redujeron un 1,4% y en el sector residuos (4,3% del total) aumentaron un 0,7%por la mayor cantidad de residuos sólidos depositados en vertederos y aguas residuales tratadas.

También bajaron en 2019 un 3,6% las emisiones de GEI derivadas de la combustión en refinerías; un 5,2% las del conjunto de gases fluorados y un 1,6% las absorciones asociadas a cambios de usos del suelo y silvicultura.