Oviedo,

Celso A. SANJULIÁN

La polesa Montse Tomé acaba de escribir una nueva página en el historia del fútbol femenino asturiano. Ha sido la primera jugadora de la región que logró el título de la Superliga, en concreto con el Levante. Centrocampista de empuje y calidad, su aportación en el éxito del equipo valenciano se plasmó en la participación en 26 de los 30 partidos. Lo suyo fue llegar y besar el santo, pasando en pocos meses de luchar por la permanencia con el Oviedo Moderno a saborear todo un título liguero.

«Esto es algo increíble», comentó Montse desde su domicilio valenciano, ya repuesta de unos ajetreados días en los que el equipo celebró por todo lo alto su éxito. «Nos han recibido en el Ayuntamiento, con la alcaldesa Rita Barberá al frente, y también hecho la ofrenda en la basílica de la Virgen de los Desamparados. Han sido dos actos multitudinarios, y a mí, que como se sabe soy nueva en estas cosas, me han impactado mucho».

La asturiana constató que el fútbol femenino es muy seguido en la ciudad del Turia, añadiendo que «este título ha sido especialmente festejado, porque el último que se ganó fue en 2003. Y para un equipo como el Levante, acostumbrado a los éxitos, eso es mucho tiempo».

El plantel que dirige Félix Carballo hizo una Liga formidable y su única derrota fue la encajada ante el Espanyol (1-2). A Montse, fichada el pasado verano, como novata que era se le auguraban dificultades, comentando al respecto que «es lógico que cueste entrar en un equipo donde hay tanto nivel, pero poco a poco lo fui consiguiendo».

En cuanto a las características del conjunto y a su encaje en él, señaló que «tenía una percepción errónea del Levante; cuando me enfrentaba a él con el Oviedo Moderno me parecía que siempre tenía el balón y que nunca defendía, pero no es así. Una vez aquí me dí cuenta de que cuando toca defender, lo hace hasta las delanteras, lo que se consigue porque todo el equipo tiene una excelente preparación física».

También le preguntamos a la polesa si los problemas económicos del equipo masculino del Levante se habían extendido al femenino, respondiendo que «siendo sincera, he de decir que nosotras estamos al día en el cobro. Sabemos que a los compañeros del equipo de Primera División se les deben importantes cantidades, pero con las chicas el club está cumpliendo. Supongo que obedece a que cada equipo cuenta con su propio presupuesto».

Otro tema obligado era el del descenso del Oviedo Moderno, el que fue su equipo durante los últimos años. Montse no ocultó su disgusto, manifestando que «se sabía desde la pretemporada que iba a ser una campaña difícil, pero en mi fuero interno albergaba la esperanza de que se salvasen. La misma tarde en que perdieron con el Colegio Alemán supe del descenso y me llevé un disgusto».

«Es una pena, porque el Oviedo Moderno es un histórico del fútbol femenino», siguió Montse, que recordó que «cuando se creó la Superliga fue de los que debutaron por invitación expresa de la Federación Española, algo que no todos los clubes pueden decir. Espero que supere esta decepción y que vuelva pronto a la élite».

Por último, y en referencia a sus planes para la próxima campaña, la futbolista asturiana avanzó que «estoy a gusto y mi idea es seguir en el Levante, aunque todavía tenemos que sentarnos a hablar. Además, queda competición, porque ahora empieza la Copa de la Reina».