Cruzar la Cordillera Cantábrica, para rodar por los territorios sureños, siempre es una grata alegría, por esa razón nos vanos a Omaña, un valle que históricamente nos han sido siempre muy cercano, pues fue lugar de paso y trasiegos múltiples de los astures, y es una buena zona para abordar un bello bucle alrededor del enclave de Riello.
Ruta ideal para gente que no quiera sorpresas..., y poder ajustar a las necesidades técnicas y físico-deportiva del grupo el recorrido.
Se comienza en Riello, para tomar la carretera de La Garandilla, dirección Sur, y desviarnos ya en las afueras de Riello, en Los Prinderos, a la izquierda y entrar en un carretil asfaltado, hasta llegar al pie del Cementerio, en cuyo punto se toma un camino a la derecha que sube por el lateral del promontorio de Viñuela, trazado que presenta nada más arrancar sus buenos repechos, tras el cual se llega al Oterico.
De aquí parte por un camino paralelo a la LE-493, que va por el Alto de la Cerca, hasta cruzar la CV-128 y seguir por camino hasta el pueblo de Villaceid, (5,5km) todo ello rumbo Este, se prosigue pegados al río para seguir ciclando en plano hasta el pueblo de Soto y Amío, tras haber rodado unos 7,8 km. En Soto y Amio, se continua al Este, rodando un tramo por la LE-493, hasta después de una cantera se dobla a la izquierda, por el Camino de la Vega de los Caballeros, que levemente va virando al Norte. Será, a eso, de los 10,6 km, cuando abandonemos esta vereda, y ya de forma definitiva pongamos rumbo Norte, por el llamado Cordel de las Merinas, que conforma parte del Cordel Babiana y este de la Cañada Vizana. La ruta prosigue su ascensión, sin apenas descanso hacia el Alto de los Abisedos, dejando un ramal a la derecha que va hacia Irede. Subida tendida que desfila por un trazado amplio de buen piso, y durante un buen rato iremos viendo varios programas de señalización de senderos, cuyas marcas están camino de los diversos promontorios que habremos de ganar como el Alto del Camparón, la Braña La Urz, o La Matona con sus 1.513 mts., de cota, teniendo que sobrepasar la Cinta del Cueto, pasando por el Nido del Águila.
Tras ello, se llega a un amplio collado marcado con una cabaña con cercado: Campar de la Ermita, de este modo habremos concluido toda la subida, unos 12 km, muy asequible, y por supuesto con increibles parajes y vistas sobre la Cordillera Cantábrica, y los que fueron los pasos tradicionales desde Asturias.
Nuestra ruta aquí da la vuelta y se toma una pista que gira sobre la mesetaria cima de la Cinta del Cueto para ir Sur, casi de forma paralela a la traza que se traía, pero en esta ocasión, se va por otra vertiente, y por un camino más bajo y que va en descenso hacia la aldea de La Urz, perdiendo unos 300 mts., de desnivel, desde la cabaña del Campar hasta el pueblo.
Un camino amplio de buen firme, que va directo a la aldea de La Urz, pudiendo ver a nuestra derecha el pueblo de Curueña y los montes que cierran el Valle Gordo.
Ya en la Urz, no queda otra que bajar por carretera hasta el mismo Riello, cubriendo así los 32 kilómetros de ruta, con la posibilidad de acortar un tanto el tramo de asfalto de bajada, Tras haber dejado La Urz, y llegando a la altura del desvío de Bonella, hay un camino a la derecha que baja a la riega de Ceide, se puede tomar este y subir luego al pueblo de Socil, y ya desde aquí se vira de nuevo al Sur hacia Riello por el llamado Camino de Curueña. Mirar si merece la pena, pues el desvío está muy cerca de Riello.
