El Avilés Sur superó en el debut liguero al siempre difícil y experimentado Pumarín (Gijón), en un partido igualado hasta el final y con constantes alternativas en el marcador debido, sobre todo, a los errores de ambos equipos en ataque propios del inicio de la temporada por falta de rodaje.
Los tiros desde el perímetro dieron una ligera ventaja a los locales en el primer cuarto (17-16), pero los gijoneses aguantaron bien y nunca perdieron la cara al partido aprovechando su mayor poder bajo los tableros. Esa fue la tónica del segundo parcial, en el que predominaron los ataques sobre las defensas con dos triples por cada bando y en el que los gijoneses probaron la defensa en zona frente a la individual de los de Llaranes. Lo más preocupante para el Avilés es que sus hombres interiores se cargaron de personales, y se llegó al descanso con uno arriba (40-41) para los visitantes.
El tercer cuarto fue el de la confirmación el equipo local, que puso en pista a tres hombres pequeños y adelantó la defensa a toda la pista dificultando la salida de los gijoneses y robando algún balón que se convirtió en canasta fácil para cobrar ventajas entre los seis y los ocho puntos. El partido se volvió lento, con muchos parones y faltas que llevan a los dos equipos a los tiros libres, una circunstancia que aprovechó mejor el Avilés para cerrar el cuarto con 66-61.
El último parcial se presentaba emocionante y con todo por decidir. Los dos equipos fueron a por el partido con un juego más fluido, pero los locales lograron mantener la distancia entre los siete y los nueve puntos hasta el último arreón de los gijoneses, que se pusieron a tres puntos, pero los locales acertaron en los tiros libres y se llevaron el choque por 90-85.
En el mismo grupo participan la Atlética Avilesina, que descansó, y el San Fernando, que tuvo que aplazar su debut en casa con el Círculo Gijón al romper una canasta.
